MESA, Arizona -- Por dos innings,  el peruano-venezolano Jesús Luzardo lo tuvo todo: una recta que parece acelerar a medida que se acerca al plato, unos pitcheos rompientes que parecían capaces de cortar un vidrio y lanzamientos lentos que dejaban congelados a los bateadores.

Luzardo ponchó a tres bateadores en dos entradas en blanco el miércoles durante la victoria 5-3 de los Dodgers sobre sus Atléticos. Fue fácil darse cuenta de por qué el zurdo de 21 años no es sólo el mejor prospecto entre los pitchers de los Atléticos, sino uno de los mejores de todo el béisbol.

Aunque Luzardo enfrentó a bateadores que probablemente empezaron la temporada en las menores, el coach de pitcheo de Oakland, Scott Emerson, sabe distinguir la excelencia cuando la ve.

“En mi opinión, este muchacho será un pitcher de la élite”, dijo Emerson, antes de indicar que Luzardo sólo necesita un poco más de experiencia antes de estar listo para las Grandes Ligas. “Es sólo cuestión de lanzar más. Su recta es eléctrica, su cambio es muy bueno y su curva explota”.

Luzardo mejoró considerablemente tras su última presentación en la Liga del Cactus el pasado viernes, cuando laboró un inning permitiendo dos hits y una carrera sucia. Se sintió más cómodo esta vez, especialmente con su mecánica y su rápida forma de trabajar entre lanzamiento y lanzamiento.

“Definitivamente me sentí mucho más cómodo”, asintió Luzardo. “Todos mis pitcheos estuvieron trabajando. La última vez fue más para acostumbrarme. Ahora fui más agresivo, atacando a los bateadores. Cuando me tardó mucho las cosas no me funcionan”.

“Cuando yo veo a alguien trabajar rápido, es porque se tienen confianza”, dijo Emerson.