Cinco aspectos en que el cambio de Teóscar impacta a Toronto

17 de noviembre de 2022

TORONTO – Los Azulejos empezaron el receso de temporada con una movida de peso, enviando al estelar patrullero dominicano Teóscar Hernández a los Marineros a cambio del relevista Erik Swanson y el prospecto lanzador Adam Macko.

Cada vez que un jugador importante es canjeado, existe el elemento sorpresa. En eso se convirtió Hernández en las últimas seis campañas, pasando de ser un bateador talentoso, pero con fallas, a un pilar de la alineación de Toronto al ganar Bates de Plata en el 2020 y 2021. Los Azulejos necesitan ser creativos en este invierno, dado el estado de su nómina. Éste parece ser el inicio de algo mayor.

De aquí en adelante, el receso de campaña de los Azulejos podría ser bien distinto:

1. El dinero importa: Este cambio es el primer paso

Hernández tenía una proyección salarial de US$14 millones de cara al arbitraje de este año. Ese número es crucial en el canje y es la razón por la cual no podremos sacar una conclusión completa hasta que termine el invierno.

Los Azulejos necesitarán llenar el vacío dejado por el dominicano en los jardines, preferiblemente con un bate que le aporte un mayor balance a la alineación. Además, esos US$14 millones pueden ser utilizados para fortalecer el bullpen y la rotación. El club estaba en una posición en la que una movida de peso – o tal vez dos medianas – tenían sentido. Ahora, tienen un bate de peso menos, pero la evaluación final de este canje llegará cuando veamos cómo gastan ese dinero.

2. ¿Por qué Hernández y por qué ahora?

Hernández iba rumbo a la agencia libre del 2023 y no había ninguna señal que indicara que los Azulejos estaban dispuestos a ofrecerle una extensión de contrato que superara lo que puede recibir el patrullero en el mercado libre. Hernández no es el jugador perfecto, pero si llega a la agencia libre con 31 años, posiblemente haya un grupo considerable de equipos interesados en él.

Por muy incómodo que sea, ésta era la oportunidad para los Azulejos de mover a Hernández o al cubano Lourdes Gurriel Jr. El salario proyectado del dominicano era mayor al de US$9 millones de Gurriel. Simples matemáticas.

3. Bienvenidos al mercado de los relevistas

Éste es el costo de adquirir a relevistas de lujo, o al menos con el potencial de serlo. Swanson, de 29 años, tiene tres años restantes de control contractual y tuvo efectividad de 1.68 el año pasado, ponchando a 70 rivales y otorgando apenas 10 bases por bolas en 53.2 entradas. Combinen esos números con lo que puede hacer Jordan Romano en la parte trasera del bullpen y el nivel del relevo de Toronto se eleva considerablemente.

También es una lección para los Azulejos. El venezolano Robert Suárez fue renovado por los Padres por US$46 millones y cinco años. El dominicano Rafael Montero pactó con los Astros por US$34.5 millones y tres temporadas y Edwin Díaz hizo lo propio con los Mets por US$102 millones y cinco campañas.

Nunca ha sido tan importante desarrollar relevistas como en la actualidad. Los Azulejos están dando pasos importantes en el desarrollo interno de jugadores, algo que podríamos ver mejor en los próximos años.

4. Reformar las praderas

Nos vamos con “reformar” en vez de “reconstruir”. Los Azulejos tendrán a George Springer y a Gurriel como titulares. Aunque Whit Merrifield puede jugar en los jardines y Nathan Lukes está en el roster de 40, parece que estamos a las puertas de otra movida de peso. Es la oportunidad para Toronto de balancear su alineación con un bate zurdo, un punto de conversación durante todo el año.

Entre las opciones en la agencia libre está la de Brandon Nimmo, quien encajaría a la perfección. Michael Conforto es otra opción, además de Michael Brantley o indagar en el mercado de cambios. De cualquier manera, los Azulejos estarán activos.

5. ¿Qué viene ahora?

Mucho. Los Azulejos siguen teniendo muchas necesidades.

Buscar a otro patrullero debe estar en el tope de las prioridades del equipo y aunque lograron mejorar el bullpen con la llegada de Swanson, la rotación sigue siendo un problema más allá de Alek Manoah, Kevin Gausman y el puertorriqueño José Berríos.

Es aquí donde los Azulejos pueden hacer un movimiento de peso. Los Azulejos saben que tienen que elevar el nivel de su rotación. La profundidad también es prioridad, pero el objetivo de Toronto debe ser añadir a uno – preferiblemente dos – legítimos abridores.