Flaherty, Molina y Shildt recuerdan a Gibson

3 de octubre de 2020

Yadier Molina lo dijo el viernes por la noche, luego de que la temporada de los Cardenales llegara a su fin al perder ante los Padres en la Serie del Comodín, y se enteraran de la noticia del fallecimiento de Bob Gibson a sus 84 años. 

“El juego es un juego”, dijo el puertorriqueño, entre lágrimas. “Puedes perder un juego, pero cuando pierdes a una persona como Bob Gibson, una leyenda, es difícil. Sólo quiero desearle lo mejor a su familia. Perdimos a otro. La nación de los Cardenales perdió a otro”. 

“Perdimos un juego. Sí, perdimos la serie. Pero con él perdimos a un gran hombre. Es difícil”. 

Menos de un mes después del fallecimiento otra leyenda, Lou Brock, Gibson falleció el viernes tras una batalla contra el cáncer páncreas.  

“Es otra pérdida grande, junto a Lou. Es difícil de asimilar”, dijo el manager de los Cardenales Mike Shildt. “Sabemos que está en un lugar tranquilo y en paz. Pero es una gran pérdida para nuestra organización. Lo vamos a extrañar”. 

Jack Flaherty sabía de la condición de Gibson y lo tenía en sus pensamientos al momento de subirse a la loma el viernes. Casi utiliza la camisera de Gibson a su llegada al estadio, pero al final decidió no hacerlo. Enterarse de su fallecimiento dolió, dijo Flaherty. Los dos habían tenido una relación especial, desde que Gibson comenzó a darle consejos en su temporada de novato en el 2018. 

El último consejo que le dio fue que fuera él mismo y que atacara.

“Todo lo que puedo decir es que estoy extremadamente agradecido por la relación que tuve con él y por lo mucho que aprendí”, dijo Flaherty después del juego del viernes. “Pude hablar con él y pedirle consejos sobre diferentes aspectos. Sólo quiero enviar mis oraciones a su familia y a todos los cercanos a él”. 

En el 2019, Flaherty tuvo una inconsistente primera mitad de temporada, Gibson habló con él sobre retar a los contrarios y ser más agresivo con sus pitcheos. Flaherty escuchó y tuvo una histórica segunda parte de campaña.  

“Es especial”, dijo Flaherty. “El hecho de que alguien de su calibre venga y te busque. Como atleta, lo siempre quieres es recibir consejos de los mejores, y no hay muchos que hayan sido mejor que él. Siempre quieres poder recibir información de personas de ese calibre”.