Estos Cachorros lucen como los del 2016

13 de agosto de 2020

Cuando terminó la temporada pasada, incluyendo aquella fatídica barrida a manos de los Cardenales entre el 19 y el 23 de septiembre, era normal preguntarse si la dinastía de estos Cachorros, los flamantes ganadores de la Serie Mundial del 2016, había terminado. El ambiente con el manager Joe Maddon no había sido el mejor durante toda la campaña y equipo se había quedado fuera de los playoffs, mientras que San Luis regresaba al béisbol de octubre. La gran interrogante para la temporada muerta no era si los Cachorros iban a cambiar a algunas de sus estrellas establecidas, sino a cuántas de ellas. ¿Estaba Kris Bryant entre los disponibles? ¿Kyle Schwarber? ¿Hasta el puertorriqueño Javier Báez? Todos ellos son elegibles para la agencia libre tras la temporada del 2021, después de todo.

Excepto que, bueno, miren esto: Con un cuarto del camino ya bajo la mesa en esta loca campaña del 2020, el equipo con el mejor récord de Grandes LIgas…son el de los Cachorros de Chicago. Tienen foja de 13-3. Y ya poseen ventaja de 6.5 juegos en la cima de la División Central de la Liga Nacional. Chicago, de acuerdo con FanGraphs, tiene un 97.2% de probabilidades de llegar a los playoffs. Y lucen como esa tremenda maquinaria que lo ganó todo en el 2016.

La percepción general de los Cachorros era que tenían el talento suficiente para surgir entre los cuatro equipos con posibilidades en la Central e intentar ir a la Serie Mundial. Sin embargo, resulta que ahora quizás sean el mejor equipo de las Mayores. ¿Cómo pasó esto? ¿Podrá durar? Vamos a darles un vistazo a las que hasta ahora son las claves del éxito de los Cachorros y qué tan sostenibles son.

1) Las viejas estrellas están liderando el camino

Esa gran personalidad de Anthony Rizzo algunas veces le hace sombra a lo gran bateador que es. Tuvo el mejor porcentaje de embasarse de su carrera el año pasado y su vista pareciera estar mejor que nunca en este 2020.

Rizzo ha sido el eje, pero muchos de tus Cachorros favoritos han mostrado su mejor versión hasta ahora, particularmente en la rotación, donde Jon Lester y Kyle Hendricks se han visto fantásticos. Bryant, Jason Heyward y Báez han tenido inicios un poco más lentos, pero ninguno de ellos está atravesando un bache preocupante. Los Cachorros, de cierta forma, lucen como los viejos Cachorros, porque en realidad, son los viejos Cachorros.

2) Los nuevos muchachos son mejores de lo que esperaban

Ian Happ, el de más experiencia entre los jóvenes que llegaron tras la temporada del 2016, tiene porcentaje de embasarse de .56, el mejor en el equipo, y .609 de slugging, también líder del club. Tyler Chatwood finalmente ha empezado a controlar sus pitcheos, dándole al equipo un sorpresivo cuarto abridor. David Bote se ha convertido en una pieza sólida. Y el veterano Jason Kipnis ha sido una revelación, con el mejor OPS de los Cachorros. En años anteriores, varias de esas piezas secundarias no han producido. No es ése el caso ahora.

3) ¡Darvish!

Yu Darvish ha mantenido el buen ritmo mostrado en la segunda mitad de la temporada pasada en sus primeras cuatro aperturas del 2020, incluyendo su joya contra los Cerveceros. con una relación de seis ponches por cada base por bolas otorgada. Darvish luce como el Darvish de antes, su mejor versión posible. Y con lo bien que están lanzando Hendricks y especialmente Lester, el derecho japonés les da tres ases a los Cachorros. Y todavía no hemos hablado de Alec Mills.

4) Están siendo más creativos con el bullpen

Ningún jugador representó la “caída” de los Cachorros en el 2019 más que Craig Kimbrel. Tras perderse la primera mitad de la temporada, nunca pudo encontrar el paso y eso le costó caro a un equipo que necesitaba cualquier victoria que pudiesen conseguir, especialmente en la recta final. Kimbrel no ha repuntado este año – ha permitido siete carreras limpias en 2.2 innings—pero los Cachorros no están dependiendo tanto de él esta vez. Rowan Wick ha sobresalido en los innings finales, al igual que Casey Sadler, pero el caballo del bullpen ha sido Jeremy Jeffress (ha enfrentado a 23 bateadores y sólo tres se le han embasado).

5) Tienen años jugando juntos… incluyendo al nuevo manager

Da un poco de pena que hayamos escrito tanto en esta nota sobre los Cachorros sin haber mencionado a David Ross. Había dudas sobre su contratación, pero evidentemente ha sido atinado hasta ahora. Se trata de una voz diferente a la de Maddon, pero con un lazo especial con los mejores años de este equipo. Quizás era eso lo que necesitaban los Cachorros.

También ayuda, por supuesto, el hecho de que ningún otro equipo de la división se haya encendido, cada uno por sus propias razones. En todo caso, esto no parece para nada una carrera de cuatro equipos. Por ahora, los Cachorros lucen como una fija para los playoffs. La dinastía no terminó en septiembre del año pasado. Y con lo loco que ha sido este año, quizás esté comenzando.