La carrera de Mariano por poco navega como Marinero
Mariano Rivera será en jugador número 39 en la historia de los Yankees en representar al equipo en el Salón de la Fama en Cooperstown cuando sea exaltado el domingo por la tarde.
Pero el capricho del exdueño de los Yankees, George Steinbrenner, de ganar una Serie Mundial poco desvió el camino del panameño hacia el Pabellón de los Inmortales del béisbol.
Resulta que Steinbrenner no estaba tan seguro de encomendarle la titularidad a Derek Jeter como el campocorto en el Bronx luego de una pésima actuación en los entrenamientos primaverales.
El Plan B para el exigente propietario de la escuadra neoyorquina era hacer un canje con los Marineros por Félix Fermín, quien en su época fue conocido por su buena defensa pero cuyo bate carecía de confianza.
En la mesa habían dos opciones para ofrecer por los servicios del torpedero dominicano, el relevista Bob Wickman y el muchacho de Puerto Caimito, quien a los 26 años hacia la transición de abridor al bullpen.
Al final Steinbrenner fue convencido en no hacer el cambio, Fermín fue dado baja por los Marineros durante las primeras semanas de la temporada regular y firmado a un contrato de ligas menores por los Yankees, y Rivera y Jeter encaminaron a los Yankees hacia el campeonato en octubre de ese mismo año, sus primeros pasos hacia Cooperstown.
A veces los mejores cambios son los que no se hacen.
