SCOTTSDALE, Arizona – Mientras los Marlins enfrentaban a los D-backs en el Chase Field a principios de esta semana, a unos 50 kilómetros del hogar del equipo de Arizona, varios de los prospectos más cotizados de la franquicia se preparaban para el inicio de la Liga Otoñal de Arizona.

Entre ellos estaban los jardineros el cubano Víctor Víctor Mesa y el dominicano Jerar Encarnación. Ambos integran el roster de Salt River, quienes arrancaron la temporada de la Liga Otoñal el miércoles. Encarnación inició en grande, conectando un jonrón por los Rafters.

Mesa, de 23 años de edad, está clasificado como el 13er mejor prospecto de Miami en la lista de MLB Pipeline, mientras que Encarnación es el 17mo.

Mesa y su hermano Víctor Mesa Jr. fueron dos de los agentes libres internacionales más preciados en ser firmados en octubre pasado. De su parte, Encarnación representa una de las historias de desarrollo más importantes de la organización.

Mesa abrió el 2019 en Clase-A Avanzada Júpiter y ascendió a Doble-A Jacksonville.

“Ha sido una experiencia de aprendizaje todo el año”, declaró Mesa. “Muchas situaciones de aprendizaje, dentro y fuera del terreno. Éste es el nivel profesional del béisbol, y hay muchas cosas que aprender. Se trata de hacer los ajustes y cambiar las cosas para mejorar”.

En su primera temporada como profesional, Mesa vio acción en 89 juegos por Júpiter, donde arrojó una línea de bateo de .252/.295/.283. En 27 compromisos por Jacksonville, sus números fueron de .178/.200/.196.

Las estadísticas un tanto pobres no sorprendieron del todo a los Marlins, ya que Mesa no participó en juegos organizados durante más de un año.

“No dudamos en invitar [a Mesa] a los campos de entrenamiento del equipo grande. Desafortunadamente, el muchacho se lesionó y no pudo vivir esa experiencia”, lamentó el presidente de operaciones de béisbol de los Marlins, Michael Hill. “Lo colocamos directo en la Liga Estatal de la Florida, una liga bastante competitiva. El muchacho tuvo un inicio flojo, pero demostró que es capaz de hacer los ajustes necesarios. Lo enviamos a Doble-A. Pude verlo jugar en Doble-A. Las otras áreas de su juego, el corrido de bases, las bases robadas…todo eso fue excelente”.

Mesa es un jardinero central con excelentes capacidades atléticas y posee una velocidad y defensa por encima del promedio, además de contar con un potente brazo.

“Pienso que tendré un mejor desempeño el próximo año”, expresó Mesa. “Ésta es una gran oportunidad para mí. La Liga Otoñal cuenta con muchos prospectos cotizados. Se juega un gran béisbol. Aquí puedo agotar más turnos y continuar mi desarrollo para poder tener una excelente temporada el próximo año”.

Cada nivel presenta sus propios retos. Mesa señaló que en Clase-A Avanzada hubo varios lanzadores con brazos bastante fuertes y que principalmente emplean la recta. En Doble-A, la calidad de pitcheos rompientes es mejor.

“Es un ajuste que debes hacer”, explicó Mesa. “En Clase-A tiraban fuerte, muchas rectas. En ocasiones tiraban una rompiente. Si una de esas no funcionaba, en varios casos volvían a la recta.

“En Doble-A era diferente. Si un lanzamiento rompiente no pasaba por la zona de strike, lo repetían hasta que cometieras un error. Necesito hacer ajustes, entrar en mi ritmo en el plato durante esos turnos”.

Encarnación, quien tiene trueno y patrulla las esquinas de las praderas, tuvo una línea ofensiva total de .276/.331/.425 con 16 jonrones y 71 remolcadas entre Clase-A Clinton y Júpiter.

“Se trata de mantener la misma mentalidad de todo el año, esperar mi pitcheo y no irme con los que ellos tiran para hacerme out”, dijo Encarnación sobre sus objetivos en la Liga Otoñal.

Encarnación es uno de los jugadores que más ha mejorado en el sistema de los Marlins.