WASHINGTON -- En julio del 2014, José Berríos fue parte de una fuerte camada de prospectos puertorriqueños en el Juego de las Futuras Estrellas en el Target Field de Minnesota, un grupo que incluyó a Javier Báez y Francisco Lindor.

Ahora, ese trío representa la mitad de los seis boricuas convocados al Juego de Estrellas en el Nationals Park de Washington, todos integrantes de #TeamRubio, la selección puertorriqueña que fue subcampeón del Clásico Mundial de Béisbol 2017.
"Siempre estamos unidos", dijo Berríos, el único representante de los Mellizos en el Juego de Estrellas 2018. "Estamos jugando por nuestros equipos y por la isla de Puerto Rico". 
Para Berríos, el 2018 ha sido la continuación de los éxitos que iniciaron el año pasado, empezando precisamente con el Clásico. Unos meses antes, diestro había tenido un año de novato para el olvido con 8.02 de efectividad en 14 aperturas. Pero gracias a un movimiento más lento hacia el plato y un mayor comando de la recta-entre otros ajustes como parte de un proceso general de maduración-Berríos lleva marca de 23-15 con promedio de carreras limpias de 3.79 en las últimas dos temporadas. 
"La verdad es que he agarrado experiencia en el béisbol y he (aprovechado) las situaciones no muy buenas para (convertirlas en) buenas", expresó Berríos, quien llegó a la mitad de esta campaña con récord de 9-7, efectividad de 3.68, dos juegos completos, una blanqueada y 127 ponches en 20 aperturas y 127.1 entradas. "He hecho mis ajustes para día tras día salir a hacer mi trabajo. Mi comando de la recta y mi confianza han sido la mayor parte de mi éxito. He localizado la recta y luego de eso vienen los pitcheos secundarios".
El premio es su primera convocación al Juego de Estrellas a los 24 años.
"El béisbol es un proceso", dijo el oriundo de Bayamón. "Día por día, tienes que enfrentar algo. Aprendí mucho y cada temporada quiero ser mejor".