Puede que éste sea un año de muchos cambios para Carlos González, el productivo bateador zurdo de los Rockies de Colorado. Finalmente, termina su contrato y el venezolano podría declararse agente libre. Todavía se habla de una eventual mudanza a la primera base.
El venezolano viene de otra sólida temporada con el madero. Su línea ofensiva fue de .298/.350/.505. Asistió al Juego de Estrellas por tercera vez.
Todavía es relativamente joven, a sus 31 años de nacido. Y aún es el jardinero derecho más sobresaliente de América Latina.
González mantiene algunas cuentas por cobrar. Debe demostrar que sus números pueden mejorar cuando juega en la carretera, por ejemplo. Descifrar con mayor regularidad a los pitchers de su misma mano. Jugar una Serie Mundial.
No necesita todo eso para ser considerado un peligro con el bate. De hecho, viene de una de sus mejores cosechas. Nunca había dado 42 dobletes, como en 2016, y desde 2010 no había superado las 100 empujadas, una meta que alcanzó por segunda ocasión.
Ningún rightfielder en la región logró un mejor OPS o un mejor WAR que él en la justa anterior. Aún no le toca vivir de sus viejas glorias, como el título de bateo que logró en 2010 o sus tres guantes de oro. Sus 174 hits están a la zaga apenas de aquellos 197 que golpeó hace siete años, cuando lideró la Liga Nacional, y acaba de alcanzar 295 almohadillas con sus conexiones, la tercera mejor cifra de su carrera.
Puede que muchas cosas cambien al final de la campaña. Quizás por fin ocurra esa mudanza de uniforme, de la que tanto se ha hablado en el último lustro, aunque él sigue predicando sobre lo bien que se siente en Denver, vestido con los colores de los Rockies.
"Hay que respetar su actitud y la forma cómo enfrenta el juego y se relaciona con sus compañeros", declaró por estos días el gerente general Jeff Bridich a MLB.com. "Es una fuerza positiva en el clubhouse, un gran tipo para tener a tu alrededor".
Eso no ha cambiado. Como tampoco ha cambiado su estatus como el mejor latino en el jardín derecho de la gran carpa.
LOS TITULARES
El dominicano José Bautista repite como el más experimentado entre los rightfielders latinoamericanos esta temporada.
Casi un tercio de los clubes tendrá en 2017 a un jugador del área patrullando la esquina derecha de las praderas exteriores, con Bautista de regreso a Toronto, luego de un pasaje por el mercado de agentes libres que le llevó a renovar su contrato con los Azulejos.
Ya tiene 36 años de edad y viene de disputar 116 juegos, la cifra más reducida para él desde 2012. Sin embargo, se las arregló para golpear 24 tubeyes y 22 jonrones, con .817 de OPS.
Su average ha caído sucesivamente desde 2014, hasta cerrar en .234 el año pasado. Pero todavía acumula boletos, además de sus extrabases.
Junto a Bautista, estos son los titulares que aporta hoy América Latina en la posición:
Abraham Almonte (República Dominicana, Indios)
José Bautista (República Dominicana, Azulejos)
Avisaíl García (Venezuela, Medias Blancas)
Carlos González (Venezuela, Rockies)
Nomar Mazara (República Dominicana, Rangers)
David Peralta (Venezuela, Diamondbacks)
Yasiel Puig (Cuba, Dodgers)
Domingo Santana (República Dominicana, Cerveceros)
Jorge Soler (Cuba, Reales)
LOS SUPLENTES
No todos los sustitutos latinos en este campeonato son jardineros naturales. Los hay también con la habilidad de desempeñarse en prácticamente cualquier lugar del terreno.
El venezolano Hernán Pérez y el dominicano Danny Santana tienen ese estatus de súper utilitys. Pérez es el más nuevo en el oficio, pues nunca había custodiado los bosques, antes de aceptar el llamado y cumplirlo con decoro, en 2016.
Una decena de suplentes del jardín derecho proceden de la región:
Emilio Bonifacio (República Dominicana, Bravos)
Leury García (República Dominicana, Medias Blancas)
Guillermo Heredia (Cuba, Marineros)
Gorkys Hernández (Venezuela, Gigantes)
José Martínez (Venezuela, Cardenales)
Michael Martínez (República Dominicana, Indios)
Paulo Orlando (Brasil, Reales)
Gerardo Parra (Venezuela, Rockies)
Hernán Pérez (Venezuela, Cerveceros)
Danny Santana (República Dominicana, Mellizos)
LA NUEVA OLA
El venezolano Anthony Santander tiene 22 años de edad, nunca ha jugado más arriba de Clase A avanzada y ya tiene estatus de grandeliga. Los Orioles de Baltimore adquirieron su contrato en diciembre, en el draft de la Regla 5, cautivados por su línea de .290/.368/.494, sus 20 jonrones y sus 42 dobletes en la campaña pasada, cuando aún crecía en las granjas de los Indios de Cleveland.
Santander tiene potencial. Su OPS en las menores es de .792, a pesar de que siempre ha jugado en ligas en las que él tiene entre uno y tres años menos que el pelotero promedio. Por eso la apuesta de los oropéndolas, a sabiendas de que una cirugía en el hombro le tiene inactivo, en la lista de incapacitados de las Mayores, a la espera de ser puesto a prueba cuando sea apto para desempeñarse sin limitaciones.
Este es parte del futuro latinoamericano en la zona derecha del outfield:
Yusniel Díaz (Cuba, Dodgers)
Anthony Santander (Venezuela, Orioles)
Raimel Tapia (República Dominicana, Rockies)