Uno mira la tabla de posiciones y enseguida recuerda que todavía falta por jugar casi el 80% de la temporada y que las cosas eventualmente podrían empezar a lucir como se pensaban que lucirían antes de comenzar la temporada.
Quizás los Bravos y los D-backs se van a enfriar. Quizás los Nacionales y los Dodgers se van a calentar.
Pero quizás no sea así.
Es posible que 20 equipos -- o más, si tenemos suerte -- estén en la contienda hasta mucho después de la segunda mitad de la campaña.
Puede ser que así sean las cosas ahora en el mundo del béisbol.
En una temporada en la cual pensábamos que sabíamos cómo se iba a desarrollar cada lucha divisional, es obvio que no nos dimos cuenta de varios detalles importantes.
Revisen la División Central de la Liga Nacional. Los Cerveceros son realmente buenos. Igual que los Cardenales. Y los Piratas son una de las mejores historias de la temporada. ¿Son esos tres conjuntos mejores que los Cachorros? Es posible que no. Pero habrá que estar pendiente.

Al menos cinco divisiones -- todas con la excepción de la División Central de la Liga Americana -- podrían tener a cuatro equipos capaces de luchar en serio por clasificar a la postemporada, o al menos seguir en contienda hasta que llegue septiembre.
No esperábamos eso, ¿verdad?
Es posible que haya cosas pasando justo en frente de nosotros que son tan básicas que por eso mismo son fáciles de no notar.
Cuando analizamos la evolución reciente del béisbol, nos enfocamos en ponches y jonrones, en formaciones defensivas y en cómo se utilizan a los pitchers.
Estudiamos tanto los datos que no nos damos cuenta de algunas cosas que deberían ser más que obvias y que son igual de importantes.
¿Cuáles son las historias, hasta ahora, de la temporada 2018?
1. Otra oleada de jugadores jóvenes ha nivelado las cosas.
Los Bravos han tenido un renacer en frente de nuestros ojos gracias, en parte, al segunda base Ozzie Albies y al jardinero izquierdo venezolano Ronald Acuña, que tienen 21 y 20 años, respectivamente. Si están buscando al siguiente jugador más joven del béisbol, ese sería Mike Soroka de los Bravos, de apenas 20 años, que la semana pasada debutó tirando seis innings para vencer a los Mets.

El béisbol alguna vez se rigió por una estricta filosofía en cuanto a desarrollar a sus jóvenes se trataba, pero eso cambió cuando Bryce Harper irrumpió en las Mayores a los 19 años para jamás verse abrumado por el momento.
Ahora, los equipos están dispuestos a retar a sus peloteros más jóvenes y talentosos, tirándolos al ruedo de una vez. Casi todos los equipos en plena lucha han recibido aportes de este tipo de promesas:
• Los Medias Rojas tienen al dominicano Rafael Devers (21) y al jardinero izquierdo Andrew Benintendi (23)
• Los Cardenales a los derechos Jordan Hicks (21) y Jack Flaherty (22)
• Los Yankees al segunda base venezolano Gleyber Torres (21) y al tercera base dominicano Miguel Andújar (23)
• Los Dodgers al primera base Cody Bellinger (22)
• Los Astros al campocorto puertorriqueño Carlos Correa (23)
• Los Angelinos a la estrella que lanza y batea, Shohei Ohtani (23)
Estos peloteros han emparejado la competencia e impactado las carreras divisiones de una forma en la que no hubiesen podido hacerlo, digamos, hace una década.
2. Las lesiones también han nivelado la lucha
Debido a que el margen de error es tan pequeño, las batallas en cada división se están viendo afectadas por las lesiones. Los Dodgers y los Nacionales han recibido golpes fuertes, lo que ha cambiado el panorama en el Oeste y el Este de la Liga Nacional, respectivamente. El bullpen de los Indios no ha podido compensar por la pérdida de Andrew Miller. Que los D-backs hayan tenido este arranque récord a pesar de tantas lesiones de jugadores clave habla mucho de la cultura que ha establecido el manager Torey Lovullo y de la profundidad del roster armado por el gerente general Mike Hazen. De igual manera, los Gigantes se han sobrepuesto a muchos problemas físicos.

3. Algunos equipos, como D-backs, Marineros y Cerveceros, simplemente son mejor de lo que pensábamos.
Armar un roster tiene tanto de arte como de ciencia, ¿verdad? Arizona agregó a lo que ya era una sólida nómina reforzando las praderas (Steven Souza Jr.), el bullpen (Brad Boxberger y Yoshihisa Hirano) y la receptoría (Alex Ávila). Ninguno fue un movimiento impactante.
El gerente general de los Cerveceros, David Stearns, no se dejó tentar por los grandes lanzadores de la agencia libre y se enfocó en dos jugadores que han dejado ya su huella: los guardabosques Lorenzo Cain y Christian Yelich. La firma de Wade Miley, sin hacer mucho ruido, podría ser clave a la hora de ofrecer profundidad al roster.

4. Si tu equipo favorito no está sumergido en el análisis moderno de datos, está en problemas
Esto no se trata solamente de usar las estadísticas para ayudar a alinear la defensiva, armar el lineup, determinar el tipo de pitcheos a usar, etc. Lo que estamos viendo ahora es una carrera armamentística para ver qué equipo se mantiene al frente de la competencia utilizando mejor la información. Se trata de un aspecto crítico, porque impacta todas las áreas del juego, desde la firma de agentes libres hasta la preparación pre-juego. Y es un gran motivo por el que estemos viviendo esta época de tanta paridad.
5. A los dioses del béisbol les encanta el caos
Esta temporada debería servir como recordatorio de que no somos nosotros los que estamos al mando, y que hay cosas que desafían la lógica e igual ocurren. De los 30 equipos, 21 de ellos llegaron a la acción del lunes a cinco juegos del primer lugar, 16 de ellos a sólo dos compromisos de la punta. Muchos equipos ven en eso una oportunidad, lo que podría desencadenar en varias semanas de locura ante de la fecha límite de cambios sin pasar por waivers del 31 de julio.
Abróchense.