¿Cuál campeón divisional tiene mejores posibilidades de repetir?

12 de febrero de 2016
Kathy Kmonicek/AP

En el 2015, solamente dos equipos de Grandes Ligas repitieron como campeones divisionales. Por lo mismo, no debemos esperar que cada uno de los seis campeones del año pasado vuelva a lograr la hazaña en el 2016.
Juzgando por los movimientos que hicieron los campeones divisionales y sus oponentes durante el invierno, a continuación evaluamos cuáles de esos equipos tienen las mayores posibilidad de volverse a coronar.
1. Mets, Este de la Liga Nacional
Es difícil hallar argumentos en contra de la calidad del pitcheo de los Mets, el cual les permitió capturar el banderín del Viejo Ciruito en el 2015. Haber retenido al cubano Yoenis Céspedes debe der hacer que la alineación de la novena de Queens sea más profunda y cuente con más poder.
Lo que está por verse es qué tipo de amenaza representarán los Nacionales. Aunque los capitalinos no rindieron a la altura de su potencial en el 2015, siguen siendo muy talentosos y se espera que estén en mejor de posición de dar la pelea este año, especialmente ahora que cuentan con el experimentado Dusty Baker como su capataz.
2. Reales, Central de la Liga Americana
Kansas City perdió al abridor dominicano Johnny Cueto y al infielder Ben Zobrist mediante la agencia libre, pero retuvo a Alex Gordon. Los Reales siguen siendo un equipo con un bullpen dominante y una defensa impresionante, los cuales estuvieron entre los factores principales que le permitieron ganar la Serie Mundial en el 2015.
El obstáculo para los Monarcas es la calidad - y la cantidad - de los oponentes, ya que la división podría estar al alcance de cinco equipos. Los Mellizos sorprendieron al terminar en el segundo lugar en el 2015 y tienen más talento joven en camino. Los Tigres, luego de ganar cuatro títulos divisionales consecutivos, se descarrilaron el año pasado. Pero durante el invierno, agregaron al abridor de lujo Jordan Zimmermann, al jardinero Justin Upton y al cerrador venezolano Francisco Rodríguez. Están de nuevo en la pelea.
Los Medias Blancas necesitaban reforzarse en la antesala y la intermedista y lo lograron al agregar a Todd Frazier y Brett Lawrie. Los Indios cuentan con el tipo de pitcheo capaz de triunfar y el surgimiento del torpedero boricua Francisco Lindor como un jugador de impacto hace lucir aun mejor las posibilidades de la Tribu. A los Reales no les debe subestimar, pero el balance competitivo ha convertido a esta división en una de las más reñidas en Grandes Ligas.
3. Cardenales, Central de la Nacional
Es cierto que los Cachorros se armaron hasta los dientes durante el invierno e incluso le arrebataron al jardinero agente libre Jason Heyward a los Cardenales. Pero San Luis, que ganó 100 juegos en el 2015, no se quedó con las manos completamente vacías.
Los Cardinales aun cuentan con un cuerpo monticular bien sólido, a pesar de que John Lackey firmó con Chicago y Lance Lynn se ha sometido a una cirugía reconstructiva del codo. Adam Wainwright estará de regreso de una lesión en el tendón de Aquiles izquierdo, el lineup luce más sólido que nunca y el roster cuenta con bastante talento joven que debe de mejorar.
Los Cachorros ganaron 97 juegos en el 2015 y les fue muy bien en el invierno. Y como de costumbre, no se les presta suficiente atención a los Piratas, que sumaron 98 victorias la temporada pasada y aún tienen talento joven en camino. Un cuarto título divisional consecutivo podría ser mucho pedir para los Cardenales, pero subestimarlos tampoco suele ser buena idea.
4. Azulejos, Este de la Americana
David Price ya no estará disponible para echarle una mano a Toronto en la recta final, porque ahora el zurdo pertenece a los Medias Rojas. Se trata de un golpe bien fuerte para los Azulejos. Quizás Marcus Stroman en realidad esté listo para asumir el rol de as. Y la ofensiva de Toronto, que incluye a Josh Donaldson, el Jugador Más Valioso de la Americana en el 2015, debe de seguir siendo una potencia.
Pero se trata de una de esas divisiones en las que que todos los clubes presentan buenos argumentos. Los Medias Rojas se robaron el show durante el invierno al agregar a Price y al taponero Craig Kimbrel. ¿Qué tan rápido podrán mejorar los jardineros de los Patirrojos y que más podrán recibir de parte del venezolano Pablo Sandoval y el dominicano Hanley Ramírez?
Los Yankees mejoraron lo que ya era un bullpen impresionante al agregar al cerrador cubano Aroldis Chapman. Los Rays cuentan con un pitcheo alrededor del cual pueden construir. Y los Orioles dieron el paso crucial de conservar los servicios del cañonero Chris Davis.
5. Rangers, Oeste de la Americana
Texas se coronó en su división el año pasado a pesar de que no contó con Yu Darvish y Derek Holland lanzó muy poco. Ahora que Darvish regresa luego de someterse a una cirugía Tommy John y Cole Hamels estará con el club por una temporada completa, el pronóstico luce aun más brillante.
Pero el resto de la división no se queda atrás. Los Astros dieron un paso agigantado en el 2015 y no lució como una simple casualidad. Los Angelinos y los Marineros podrían mejorar y es poco probable que los Atléticos pierdan 90 juegos en campañas consecutivas.
6. Dodgers, Oeste de la Nacional
Los Ángeles perdió a Zack Greinke, quien viene de una temporada sensacional. El japonés Kenta Maeda fue agregado a la rotación junto con Kazmir. No hay duda de que este sigue siendo un equipo capaz de deslumbrar, pero sus rivales hicieron movimientos de peso durante el invierno.
Los D-backs le llegaron al precio a Greinke y luego adquirieron en un canje con los Bravos a Shelby Miller. La rotación de Arizona luce transformada, al igual que sus posibilidades de llevarse la división. De su parte, los Gigantes, que ganaron la Serie Mundial en el 2010, el 2012 y el 2014, agregaron a Cueto y a Jeff Samardzija a una rotación encabezada por Madison Bumgarner. El jardinero Denard Span también es una adición útil para San Francisco.
Y quizás los Padres tengan en el 2016 la campaña que esperaban tener el año pasado. De alguna manera u otra, los Dodgers, que han ganado tres títulos divisionales consecutivos, se les hará bien difícil repetir por cuatro años al hilo.