Eduardo Núñez espera ayudar a los Gigantes a clasificar este año

5 de agosto de 2016

SAN FRANCISCO - Cuando llegó a los Gigantes de San Francisco a mediados de la temporada del 2012, quizás muy pocos calculaban que el experimentado pelotero venezolano reverdecería laureles de la forma brillante como lo hizo con el uniforme de Naranja y Negro.
A sus 36 años de edad, Scutaro aseguró el puesto de segunda base titular del escuadrón de Bruce Bochy, bateó .362 en 61 juegos y, no conforme con eso, guió a la novena en la postemporada al convertirse en el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional.
Casi exactamente cuatro años más tarde, otro pelotero latinoamericano con experiencia en las Grandes Ligas llegó a los Gigantes, tampoco con la misión de cargar al equipo sobre sus hombros, pero sí podría ser clave en la novena en ruta hacia otra posible incursión en la postemporada. Se trata de Eduardo Núñez, de Santo Domingo, República Dominicana, adquirido el 28 de julio de los Mellizos de Minnesota.
Capaz de jugar en varias posiciones del cuadro e inclusive los jardines, Núñez, de 29 años de edad, se incorporó a los Gigantes apenas un par de semanas después de haber sido invitado por primera vez al tradicional Juego de Estrellas. El precio por sus servicios fue alto, porque tuvieron que desprenderse del promisorio zurdo dominicano Adalberto Mejía, pero los Gigantes saben que también pueden contar con el aporte del versátil pelotero quisqueyano en el 2017.
"Nos trae el valor adicional de su velocidad", proclamó el gerente general de los Gigantes, Bobby Evans. "Nos brinda experiencia, flexibilidad, versatilidad y un buen bate".
Los inquilinos de AT&T Park no eran los únicos interesados en los servicos de Núñez, que bateaba tan alto como .340 a mediados de mayo. Los Indios de Cleveland lo tenían en la mira para alinear posiblemente en la antesala, dada la baja en la producción de su veterano paisano , por cierto puesto en asignación el 1ro de agosto.
En su primer juego en la alineación inicial de los Gigantes, Núñez probó su valía de inmediato al conectar un doblete productor de dos anotaciones, precisamente en instantes en los cuales su nuevo equipo bateaba por debajo de .150 con hombres en posición anotadora. También se robó una base.
Sus compañeros de equipo lo recibieron con los brazos abiertos, a sabiendas de que Núñez puede darles ese respiro necesario especialmente en los agotadores meses de agosto y septiembre
"Es el pelotero que nos hacía falta", aseguró el jardinero venezolano Grégor Blanco del dominicano formado a nivel de escuela secundaria en la Academia Militar de San Juan, Puerto Rico. "Es un jugador versátil, con buen bate, buena velocidad y rinde mucho con hombres en posición anotadora. Todos estamos bien contentos de haberlo adquirido".
Ese punto de vista de Blanco es compartido plenamente por el paracorto , el receptor y el experimentado lanzador -que lo conoce muy bien de la Liga Americana-entre otros integrantes de la divisa de la Bahía.
"Nos da a Joe [el segunda base Panik] y a mí la posibilidad de tomar días libres", analizó Crawford, ganador del Guante de Oro al mejor paracorto de la Liga Nacional en el 2015. "Con toda seguridad, aporta velocidad y hace buen contacto. Va a ser parte importante del equipo"
"Es bastante dinámico, lo mismo conecta con fuerza que se roba una base", describió Posey, receptor abridor por la Liga Nacional en el reciente Juego de Estrellas. "Realmente tiene muchas herramientas y esa versatilidad será bien útil para nosotros".
"Encaja perfectamente aquí", indicó Peavy. "Tiene buena disposición y conducta. Juega con el estilo de los Mellizos, que es comparable al que tenemos nosotros".
Debutante en las Grandes Ligas con los Yankees de Nueva York en el 2010, Núñez, con experiencia en tres series de postemporada con los Bombarderos del Bronx, está bien contento de llegar a un equipo que pudiera ser participante en su cuarta Serie Mundial desde el 2010 y sobre toda por la confianza que de una vez le han dado.
Por ejemplo, ya Bochy le brinda la luz verde para que pueda robar bases, a sabiendas de que tiene una gran habilidad para ello. Solamente tres peloteros lo superan en ese renglón en las Grandes Ligas en el 2016.
"Me dijeron que fuera listo [al correr]", informó Núñez, que entre sus batazos del 2016 se cuenta un cuadrangular dentro del parque. "La razón por la cual estoy aquí es para ganar juegos. Me alegra estar en esta situación. Nuestra única preocupación es triunfar, no importa cómo lo hagamos. Cada uno va a poner su granito de arena para que éso sea posible".
Con respecto a su propia forma de jugar, Núñez espera aplicar en el diamante lo aprendido en sus tantos años de experiencia en la pelota profesional, que incluye su participación en la liga invernal dominicana con los Toros del Este.
"Trato de ser simple, no hacer mucho, solamente ponerle buen swing a la pelota", especificó el dominicano, que intervino como reemplazo en la segunda base en el Juego de Estrellas celebrado el 12 de julio en San Diego. "No importa dónde me pongan en la alineación. Puedo hacerlo de primero, octavo, noveno, donde sea".
En el 2016, Núñez ha jugado primordialmente en el campo corto y la esquina caliente, posición en la cual pudiera alinear con mayor frecuencia con su nuevo club debido al canje a los Rays de Tampa Bay del otrora titular de esa posición, .