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Iglesias a liga menor luego de un debut decente

CHICAGO - Al principio de su debut en Grandes Ligas, el cubano Raisel Iglesias parecía estar aprovechando su calidad de desconocido para los bateadores de los Cardenales.

Eso fue antes de que San Luis le hiciera ajustes al lanzador de los Rojos. Iglesias, de 25 años de edad, permitió cinco hits y tres carreras en 5.0 entradas, saliendo sin decisión en lo que al final fue una derrota de Cincinnati por 7-5 en 11 innings.

La realidad es que el daño que le hicieron los Cardenales a Iglesias fue después de que el cubano retirara a 11 de los primeros 12 bateadores que enfrentó-lo cual le causó muy buena impresión a la fanaticada de Cincinnati.

"Creo que las cosas van a ir mejorando", dijo Iglesias. "No quiero ser presumido, pero creo en mis pitcheos. Creo que la primera (salida) es la más difícil, pero ya salí de eso. Ahora a esperar la próxima oportunidad".

En un primer inning de 13 pitcheos, Iglesias retiró en orden a los Cardenales, incluyendo dos outs por la vía del ponche. No sólo cambió de velocidad y trabajó ambos lados del plato, sino también enseñó múltiples ángulos del brazo de lanzar, con pitcheos por encima del brazo y del lado.

"Confío en mis pitcheos en cualquier conteo", dijo Iglesias, quien se convirtió en el octavo jugador en la historia de los Rojos en debutar con el equipo grande sin jugar en liga menor y el primero desde que lo hizo Mike Leake en el 2010.

En el quinto inning, San Luis descifró los envíos de Iglesias con una reacción de tres carreras que incluyó un doble del boricua Yadier Molina, una base por bolas otorgada a Kolten Wong y un sencillo productor de dos carreras de Matt Carpenter. Además, Jason Heyward le conectó doble empujador.

"Teníamos muy poco video de Iglesias, y lo que vimos (el domingo) fue distinto a lo que habíamos observado en los videos", dijo el manager de los Cardenales, Mike Matheny. "Estaba bajando (el brazo) más. Pero aun si hubiéremos tenido más video, los muchachos de cualquier manera hubiesen tenido que descifrar sus movimientos, punto de soltar la bola y demás tendencias".

Iglesias sigue siendo una obra en progreso, en las primeras etapas de su carrera en los Estados Unidos. Fue relevista en Cuba y, de hecho, la mayoría de los equipos que se interesaron por sus servicios lo vio como tal. Solamente los Rojos, que firmaron al lanzador a un contrato de siete años y US$32 millones, lo proyectaron como abridor.

"En los primeros cuatro innings se vio sobresaliente, casi dominante", dijo el manager de los Rojos, Bryan Price. "Pero a lo mejor empezó a cansarse ahí mismo. Hace mucho que no funge como abridor y (los Cardenales) se aprovecharon de esa fatiga".

Para que Iglesias pueda seguir lanzando con regularidad, fue enviado a Triple-A Louisville ante la inminente regreso de la lista de lesionados de Homer Bailey.