Iván Rodríguez disfruta sus primeros días en Cooperstown

28 de julio de 2017

COOPERSTOWN, Nueva York -- El primer día del puertorriqueño Iván Rodríguez en Cooperstown estuvo bastante ocupado.
La mañana comenzó con una entrevista a las 7:30 para una estación de televisión de Texas. Treinta minutos después, se estaba sentando con un grupo de reporteros que cubrieron su carrera como jugador. A las 9, le tocó el turno de hablar con los medios nacionales de los Estados Unidos.
También va a reunirse con fanáticos, amigos, ex compañeros y familiares durante todo el fin de semana. Además, jugará golf.
Bienvenidos al mundo de un nuevo miembro del Salón de la Fama. No es que Rodríguez hubiese querido que fuese distinto.
"Es algo grandioso", dijo. "He estado aquí un par de días y todo el ambiente es fantástico. Todos los jugadores del Salón de la Fama están aquí y cada vez que pasó por el lobby veo a uno por ahí".
Rodríguez reconoció que esta emocionado, nervioso y un poco ansioso por la ceremonia de exaltación el domingo. Es difícil culparlo. Es el día más importante de su vida profesional.
"Estar en el podio y tener detrás de mí a todos esos miembros del Salón de la Fama va a ser una sensación increíble", dijo. "Es algo grande. ¿Qué más puedo decir?".
Para Rodríguez, los mejores momentos del viaje hasta ahora han sido las oportunidades de conocer a miembros del Salón por primera vez y saludar nuevamente a aquellos que ya conocía. Y está emocionado por encontrarse de nuevo con el "Pudge" original, Carlton Fisk.
"Fue él quien me dio mi décimo Guante de Oro. Siempre hemos sentido mucho respeto uno por el otro", dijo Rodríguez. "Le dije, 'Tú eres mi héroe'. Y él me contestó, 'Bueno, si soy tu héroe, por qué sigues superándome en todo'. Sólo le dije que era parte del juego. Lo respeto muchísimo. Es una gran persona".
Rodríguez se siente orgulloso del trabajo que hizo detrás del plato y espera que su exaltación les abra más puertas a los receptores en el futuro. También espera que sirva para que se valore más la posición.
"No es un trabajo fácil, jugar más de 100 jugos detrás del plato. No sólo eso, sino que tenemos que venir temprano al estadio, estudiar el juego. Es un trabajo fuerte y pude hacerlo por 21 años", dijo. "Pero el solo hecho de estar aquí junto a Johnny Bench, Mike Piazza y otros receptores del Salón es fantástico".
"Físicamente me siento muy bien", afirmó Rodríguez. "Le doy gracias a Dios por eso. Pienso en todo lo que trabajé durante mi carrera. Me rodeé de gente muy buena. Entrenadores físicos que empezaron a trabajar conmigo cuando tenía 21 años y diseñaron aquel programa que sigo haciendo todavía. Yo sé que si dejo de hacerlo, dejaría de divertirme tanto. Por eso sigo trabajando y haciendo las cosas que hago para mantenerme en forma".
Rodríguez sabe que hay quien se pregunta cosas. Asegura que el trabajo fuerte fue lo que marcó la diferencia en su carrera y refuta cualquier vínculo con las sustancias para mejorar el rendimiento.
"Absolutamente, nunca las tomé. Nunca", enfatizó. "Siempre dije que, para mí, la disciplina fue muy importante desde el primer día. Cuando eres fuerte físicamente y mentalmente, y juegas duro, eso es lo que haces y tienes grandes años. Eso es lo que dije y sigo diciendo.
"Siempre entrené, todo el tiempo. Esa es una de las cosas que la gente no ve, mis trabajos por la mañana, a las 9, cuando todavía muchos andaban durmiendo y yo estaba corriendo, alistándome para un juego a las 7 de la noche. Este es el resultado. Estar aquí y ser un Salón de la Fama".