BOSTON -- Probablemente no habrá otro jugador en el béisbol que se enfoque más en la rutina como el toletero de los Medias Rojas, J.D. Martínez.

El estelar cañonero está casi obsesionado con su tiempo en la jaula de bateo, el estudio de video y el platicar sobre cada aspecto del juego con un gran grupo de sus compañeros--siempre que puede.

En otras palabras, esta campaña de 60 partidos que incluye 100 páginas de protocolos de salud y seguridad tendrá a Martínez un poco fuera de su elemento.

Pero Martínez, quien llega a su tercera temporada con los Patirrojos, promete que hará los ajustes necesarios para tener buenos resultados en un ambiente de cambios constantes.

“La rutina definitivamente deberá cambiar”, declaró Martínez. “Eso es evidente con todo lo que estamos viendo. Pero debes adaptarte y hallar una manera de fijar una nueva rutina que funcione”.

Algo que Martínez quiere procurar conseguir durante estas tres semanas de entrenamientos son turnos al bate. En enormes cantidades. Para lograrlo, el toletero está consciente de que debe ser creativo.

“Apenas llegué, le dije a [el dirigente Ron] Roenicke que necesito bastantes turnos para entrar en ritmo”, explicó Martínez. “Entonces, si es necesario ser el bateador para sesiones del bullpen, me pueden llamar. En los Entrenamientos de Primavera no agotamos los suficientes turnos para sentirnos cómodos, así que ahora tendremos que trabajar fuerte”.

Sin embargo, lo que Martínez pierda en su rutina, lo ganará en lo que serán ideales condiciones climáticas para batear en los estadios durante la mayoría de la temporada abreviada.

“No cabe duda de que eso me tiene contento”, dijo el toletero. “Los primeros meses en Boston no son nada divertidos con esa brisa fría, especialmente hacia el jardín derecho”.