John Farrell: Pablo Sandoval deberá ganarse el puesto de tercera base

13 de febrero de 2017

FORT MYERS, Florida -- En la víspera del arranque de los entrenamientos primaverales, el manager de los Medias Rojas, John Farrell, habló el domingo sobre las competencias que se avecinan en el equipo. Y ninguna de ellas recibirá más atención que la lucha de por recuperar su puesto en la tercera base.
Con el cubano y fuera del equipo, se ha especulado abiertamente que Pablo Sandoval estará en la alineación abridora en el Fenway Park cuando los Medias Rojas abran la temporada el 3 de abril ante los Piratas.
Sin embargo, Farrell dejó claro que el puesto no se le regalará al veterano, quien ha tenido un duro inicio de carrera con los Medias Rojas después de haber firmado un contrato por cinco años en noviembre del 2014.
"Pablo ha hecho un gran trabajo al ponerse en mejor forma física", dijo Farrell. "Pero lo que haga en el terreno, que sea capaz de retomar el nivel que tuvo antes de firmar con nosotros como agente libre, eso es lo que esperamos. Pero es un puesto en el que hay competencia".
es el principal rival de Sandoval, pero su gran valor está en el hecho de poder jugar siete de las nueve posiciones. 
El roster sería más funcional y productivo con Sandoval tomando la mayoría de los turnos como tercera base, razón por la cual los Medias Rojas están tan interesados en que logre restablecerse tras dos años de inefectividad y lesiones.
"Hay una cosa que sé", dijo Farrell. "Tiene el deseo, está altamente motivado y no ha perdido sus habilidades. Al menos, los ingredientes están allí para que vuelva a ser nuevamente un pelotero productivo".
Restan tres años en el contrato de cinco temporadas y US$95 millones que Sandoval firmó con los Medias Rojas hace dos inviernos. Por lo tanto, tiene tiempo de sobra para recuperarse como lo hicieron el dominicano Hanley Ramírez y en el 2016.
Sandoval, de 30 años de edad, perdió el trabajo como antesalista ante Travis Shaw durante los entrenamientos primaverales el año pasado y apenas jugó tres encuentros durante la ronda regular antes de caer lesionado del hombro izquierdo, lo que lo obligó a operarse y eventualmente quedar fuera por el reto de la campaña.
En el 2015, su primera temporada en Boston, jugó 126 encuentros y bateó .245, con promedio de embasarse de .292, 10 jonrones, 25 dobles y 47 empujadas.