CLEVELAND - Una noche fabulosa para un beisbolista que ni sabía que iba a jugar pelota en el resto del 2016 y una velada histórica por lo juvenil de la alineación exitosa de los Cachorros de Chicago, caracterizaron la victoria por 5-1 de la novena dirigida por Joe Maddon en el Juego 2 de la Serie Mundial.
Kyle Schwarber, que apenas se enteró hace ocho días de que podría "por lo menos tratar" de reaparecer en plena Serie Mundial, impulsó dos de las cinco carreras de los oseznos en su victoria sobre los Indios de Cleveland.
Seis peloteros por debajo de 25 años de edad - tres de ellos latinoamericanos - implantaron un récord original para una novena ganadora de un encuentro en la finalísima beisbolera.
"Se debe al excelente trabajo de los scouts, de los jefes, de tener confianza en los jóvenes", elogió el receptor venezolano Willson Contreras. "Estos peloteros son una bendición para este equipo. Uno trata de subirle el ánimo a cualquiera, al jugar con energía.
"Estoy orgulloso de mi persona y de este equipo por tener tantos jóvenes con talento", expresó el catcher de 24 años de edad. "Siempre estamos hablando. Los jóvenes siempre estamos en grupo. Las cosas negativas tratamos de eliminarlas".
Uno de esos jóvenes es precisamente Schwarber, que por segundo juego al hilo demostró que no le importa haberse pasado seis meses sin ver lanzadores de las Grandes Ligas con tal de que le pongan en las manos un bate a la hora buena. Con solamente 23 años de edad, Schwarber pegó dos hits, se embasó tres veces y ahora su promedio es .429 en la Serie Mundial del 2016.
"Yo le dije a Schwarber 'tú tienes un corazón muy grande, así que, si tú crees que puedes estar listo para jugar después de seis meses, puedes hacer algo especial en esta Serie Mundial"', lo felicitó Contreras.
De apenas 24 años de edad, el jardinero cubano Jorge Soler fue uno de los seis jóvenes fantásticos de los Cubs en la histórica alineación juvenil del Juego 2 y se sintió orgulloso de ser parte de ese grupo.
"De verdad que no sabía eso, pero creo que es bastante bueno", describió Soler. "Somos jugadores jóvenes y creo que vamos a estar bastante rato en Series Mundiales".
"Lo que ha hecho Schwarber no tiene explicación, es tremendo bateador", calificó Soler de la nueva faena exitosa del artillero designado de los Cubs.
El boricua Javier Báez, uno de los seis peloteros de los Cubs que alinearon el miércoles con 25 años o menos de edad, expresó su satisfacción de ser un equipo que gane con semejante impulso juvenil.
"Obviamente, es bien emocionante estar en este equipo en este momento, con tanta gente esperando que ganemos desde hace tanto tiempo, haciéndolo con tantos jóvenes y con ayuda de los veteranos", enfatizó el segunda base de la Isla del Encanto.
De Schwarber, Báez aseguró que no le sorprende para nada que el poderoso bateador zurdo de los Cubs reapareciera a lo grande.
"Yo lo vi cuando estaba haciendo su rehabilitación y me dije 'él no está lesionado, luce totalmente normal'", declaró Báez. "Lo que hizo el año pasado, todo el mundo espera que lo repita. Está cogiendo buenos turnos y haciendo swing muy bien".
Un pelotero bien valioso, pero que no forma parte de la generación juvenil de los Cachorros, el receptor venezolano Miguel Montero, describió lo que han hecho los muchachos de los Cubs como un canto importante con miras al futuro de esa novena.
"Eso quiere decir que hay Chicago para rato", pronosticó Montero, que ha visto con admiración como muchos novatos de los Cubs se han consolidado como peloteros muy valiosos para el equipo. "Estos jugadores hoy en día son buenos y en la medida que el tiempo vaya pasando, van a seguir creciendo como peloteros, como personas, como profesionales".
"Obviamente, estoy orgulloso de cada uno de ellos", destacó Montero, héroe de la victoria de los Cubs en el Juego 1 de la Serie de Campeonato con un grand slam. "Han crecido muy rápido del año pasado a este año Y espero que sigan creciendo".
El propio Schwarber indicó que gran parte de su éxito tiene que ver con lo mental, más que el aspecto físico.
"Uno necesita visualizar cómo van a ser las situaciones cuando uno retorne", expresó Schwarber. "De esa manera, no se queda fuera de paso cuando se produzca ese instante. Uno quiere ponerse en buenas posiciones en su cabeza con la esperanza de que eso ocurra en el terreno. La visualización es una herramienta grande. Creo mucho en eso".
Finalmente, Schwarber reveló que no está decretado al 100% que pueda alinear o no cuando la serie se vaya desde el viernes al Wrigley Field, donde no existe la regla del bateador designado.
"Vamos a ver qué pasa", admitió Schwarber. "Nada está escrito sobre piedra. Nadie me ha dicho nada, así que de momento la historia [que no ha recibido el visto bueno para jugar en los jardines] es la misma".