LAKE BUENA VISTA, Florida - Por empezar su cuarta temporada en proceso de reconstrucción, los Bravos estarán entrando en una fase de transición durante la cual integrarán a varios de sus prospectos de élite a nivel de Grandes Ligas y comenzarán a darse una idea de cuáles son las piezas que necesitarán para alcanzar su potencial y convertirse en legítimos contendientes a la postemporada en el 2019.
El enfoque principal durante los entrenamientos primaverales ha estado sobre el venezolano Ronald Acuña, Mike Soroka y Austin Riley. Estos aclamados prospectos nos han dado una probadita de lo que son capaces de hacer durante su primer campamento de Grandes Ligas y también un indicativo de que muy pronto podrían ser capaces de fortalecer el núcleo de los Bravos que ya incluye a Freddie Freeman, al curazoleño Ozzie Albies y al venezolano Ender Inciarte.
El éxito de esta temporada dependerá en gran parte de los brazos jóvenes en la rotación, la cual ya se vio mermada por una lesión en el tobillo izquierdo del brasileño Luiz Gohara, quien ha quedado fuera de acción por lo menos hasta finales de abril. Si Mike Foltynewicz y Sean Newcomb progresan de manera satisfactoria y Soroka hace valer su potencial una vez que sea llamado, los Bravos tendrán una mejor idea de cómo lucirá su rotación a partir del 2019.
¿Cuál es la meta?
Se puede decir que los Bravos están a punto de embarcarse en una temporada de 324 juegos. Atlanta pretende acercarse a la meta de producir su primer récord ganador desde el 2013, pero no a expensas del futuro inmediato. Tendrán dinero para gastar el próximo invierno y el potencial para dar pasos significativos para el 2019. Pero antes de realizar cualquier maniobra de peso, primero desean aprovechar la oportunidad de analizar y evaluar todo su talento local.
A los Bravos les encantaría terminar con marca de .500 y finalizar la temporada de manera sólida con la mayoría de sus peloteros jóvenes asumiendo puestos claves. Pero la meta principal este año es tener una mejor idea de la etapa de desarrollo en la que se encuentran sus prospectos y entender mejor lo que el equipo necesita para dar otro paso hacia adelante la próxima campaña.
¿Cuál es el plan?
La ofensiva debe de beneficiarse de la adición de Acuña, quien podría hacer su debut en la Gran Carpa tan pronto como el 13 de abril, y una temporada completa de Freeman, quien estaba produciendo números con calibre de JMV antes de que una fractura en una muñeca lo dejara fuera por casi siete semanas el año pasado. Pero existe algo de incertidumbre dentro de la rotación, la cual podría sufrir varias transformaciones esta temporada.
Brandon McCarthy brindará estabilidad al cuerpo de abridores y un repunte del colombiano Julio Teherán sería más que bienvenido. Pero el enfoque de la rotación se centrará alrededor de Foltynewicz, Newcomb y Gohara. Los Bravos utilizarán los primeros dos meses de la campaña regular para evaluar a sus abridores y tener una mejor idea de dónde Soroka podría encajar en caso de ser considerado listo para las Mayores para junio.
Foltynewicz, Newcomb, Gohara y Soroka son todos capaces de superar a Teherán en la tabla de profundidad en algún momento este año. La directiva también vigilará de cerca lo que hagan Kyle Wright y Kolby Allard, un par de cotizados prospectos que podrían ser llamados para integrar la rotación en cualquier momento esta temporada.
¿Qué podría salir mal?
Aunque los dominicanos Arodys Vizcaíno y José Ramírez, además de A.J. Minter, son capaces de formar un confiable trío de relevistas para las últimas entradas, el bullpen carece de profundidad de calidad. También podría llevar más tiempo de lo previsto para que la rotación tome forma.
Foltynewicz y Newcomb han dado señales alentadoras durante la primavera. Pero Gohara generó preocupación acerca de su durabilidad después de sufrir dos lesiones durante el primer mes de los entrenamientos. Los Bravos necesitan que al menos dos de estos jóvenes den el siguiente paso este año para alimentar la confianza acerca del futuro cercano.
¿Quién podría sorprender?
Mientras que los fanáticos de los Bravos esperan con ansias la llegada de Acuña, Dustin Peterson ha demostrado que él también podría llegar y generar impacto en los jardines en algún momento de esta campaña. Peterson se vio aquejado la mayor parte del año pasado por una fractura en la mano izquierda que sufrió durante los entrenamientos, pero el cañonero derecho ha regresado este año en salud y posiblemente más fuerte que nunca. Si los Bravos optan por canjear a Nick Markakis en algún momento este año o existe la necesidad de subir a un jardinero, Peterson podría convertirse en una valiosa adición a mitad de temporada.