Marwin González ha ascendido tanto como los Astros

19 de junio de 2018

En cierto modo, la historia del venezolano Marwin González es paralela al ascenso de los Astros hasta convertirse en una súper potencia del béisbol. A medida que los Astros llegaban a la excelencia, también lo hacía González. De manera que se ha ido transformando en un pelotero con gran poder de bateo, capaz de jugar en cualquier posición en el campo. González ha formado parte de los Astros desde el principio de la trayectoria. Ha visto el equipo situarse en último lugar y perder más de 100 juegos durante tres temporadas consecutivas, pero también llegar a ser uno de los mejores conjuntos de la liga y convertirse en Campeones Mundiales.
La victoria es aún más satisfactoria cuando has tenido que vivir en carne propia las desilusiones de perder constantemente. Hay que saber perder para poder ganar. Y ahora, más que nunca, el pelotero sabe lo que este concepto realmente significa.
"Estuve en los momentos súper malos y ver todo el trabajo que han venido haciendo tanto la directiva como los pocos que quedamos aquí," dijo González. "Creo que somos José (Altuve), Dallas (Keuchel) y yo. Eso lo hace más especial - ver que pasamos los momentos malos en vez de venir cuando ya está todo listo para ganar; ahora esto es un equipo ganador. Creo que significa más para nosotros, sin quitarles crédito a los otros jugadores, que estuvimos aquí en los momentos malos. Ahora las cosas han cambiado al 100 por ciento."
Mantenerse firme y motivado durante los altibajos y la incertidumbre que conlleva una carrera en béisbol no es fácil y, aun así, Marwin González siguió luchando para convertirse en el hábil pelotero que es hoy. Se puede decir que todo fue parte de la preparación para estar listo para vivir los mejores momentos de su carrera que aún están por llegar.

Cuando González debutó en el 2012 en las Grandes Ligas, empezó jugando solo en tres posiciones: tercera base, campocorto y segunda base. Ahora, el bateador ambidiestro ha jugado en todas las posiciones, menos en la de pitcher. Actualmente, en el 2018, González fácilmente intercambia entre posiciones de cuadro y el outfield con gracia y habilidad. ¿Y lo más increíble? Es sobresaliente en todas las posiciones y las domina con astucia.
Sin preferencia alguna
Cuando se le pregunta qué posición prefiere, responde que sinceramente no tiene preferencia. "Antes sí, cuando estaba en ligas menores," recordó González. "Siempre quería jugar short, porque esa fue la posición que crecí jugando. Pero después de que llegué a este equipo, me dieron la oportunidad de jugar en el infield y en el outfield. He tomado muy profesionalmente la oportunidad de jugar que me han dado. Solo quiero ir al cien por ciento en cualquiera que sea la posición que juegue."
González llegó a las Grandes Ligas pensando que sería un campocorto. Ahora, no solo domina todas las posiciones de cuadro, sino que también se desenvuelve en el outfield como si fuera su posición natural. Usualmente, un cambio y una transición tan grandes pueden ser un reto enorme para muchos peloteros. Pero el hecho de que González se pueda mover en el outfield como si lo hubiera hecho toda su carrera habla de su gran talento innato como pelotero y también de su disciplina.
González atribuye su éxito en el outfield al simple hecho de estudiar los movimientos y posicionamiento de sus compañeros. Dice haber pulido sus habilidades en el outfield viendo a sus compañeros.
"Viendo los mejores y trato de copiar pequeñas cosas de ellos," explicó González. "Siempre pregunto también. Estuvo Carlos Beltrán, que jugó 20 años en Grandes Ligas, y siempre me mantuve preguntándole para seguir aprendiendo, seguir mejorando. Le pregunto siempre al center field, sea Jake (Marisnick) o George (Springer). Siempre les pregunto cuál es la mejor posición, incluso durante el juego. Siempre los estoy viendo para ver dónde vamos a jugar y cuál es la recomendación de ellos."
Marwin usa todos los recursos que tiene a mano cada día para seguir aportando al equipo en cualquiera que sea la posición que juegue.
Marwin tiene una sencillez que lo caracteriza, por eso, trabaja duro en silencio y demuesrta los frutos de su trabajo en el terreno. Maneja un bajo perfil, pero su versatilidad lo hace único e indispensable. La versatilidad del bateador ambidiestro le permite al equipo tener opciones en su alineación y, más allá, él puede substituir a cualquier compañero, ya sea por necesidad de descanso o por una lesión. Tener un jugador tan versátil y útil es un privilegio que muchos equipos quisieran tener.
No solo un pelotero que podrías colocar en cualquier posición o situación, sino también uno que sea competente en todas. La temporada pasada, González lideró a los Astros en carreras impulsadas con 90 y cuarto lugar con 23 jonrones y 34 dobles, próximo a las superestrellas como José Altuve, , y Yuli Gurriel.
Luce en todas partes
Es importante destacar que ninguno de los peloteros que lo precedieron en estas categorías domina múltiples posiciones como lo hace González. Los pocos en el equipo que lo preceden no solo son líderes dentro del equipo, también lideran toda la liga. El hecho de que González sea parte de este mismo grupo, y que esté compitiendo a tan alto nivel en múltiples posiciones, habla del gran talento y adaptabilidad que tiene. González es pelotero por naturaleza.

El principio de la temporada 2018 ha sido un poco difícil para González, ya que no está produciendo al nivel que le gustaría, pero se mantiene firme en sus metas personales para la temporada. Acierta que la meta de todo pelotero debería ser aportar lo máximo que pueda para ayudar al equipo.
"Jugar fuerte día a día, eso es lo que podemos controlar y llegar lo más lejos que podamos," confirma González.
Se mantiene con actitud positiva y entiende que todo es parte de un proceso. Cada pelotero pasa por momentos difíciles y la clave para sobrepasarlos es ser optimista y agradecido.
"Han sido un poco difícil los primeros dos meses de la temporada, pero de eso se trata. Pienso que el béisbol es el deporte más difícil, y lo que lo hace especial también. Momentos buenos, momentos malos - no siempre va ser positivo todo. Pero estoy bastante contento con lo que se ha logrado en equipo hasta ahora." Es difícil superar la marca de ser campeón mundial. Es el motivo de orgullo máximo. Cuando se le pregunta a Marwin de qué se siente más orgulloso en su carrera aparte de ganar la Serie Mundial, con mucha humildad, responde que su máximo sueño de niño era llegar a Grandes Ligas. Marwin González vive agradecido simplemente de estar aquí.
"Me siento orgulloso de simplemente pertenecer a este equipo," dijo González con una sonrisa. "Hay muchas personas que quieren estar aquí y no han llegado a este nivel. Y me siento bendecido de estar aquí. De eso es lo más orgulloso que me siento, de pertenecer a un clubhouse de Grandes Ligas y de todo el tiempo que tengo aquí."