Rizzo y Bryant sueñan con jugar béisbol en octubre

CINCINNATI - Octubre todavía está muy lejos.

Pero Anthony Rizzo y Kris Bryant casi lo pueden sentir desde aquí.

Eso era lo que se escuchaba de los dos jugadores de los Cachorros, el lunes, antes de ponerse el uniforme de la Liga Nacional para participar en el Derby de Jonrones presentada por Head & Shoulders. Rizzo admitió que sí piensa en la post-temporada cuando la hiedra del Wrigley Field se empiece a poner roja.

"Siento que cada victoria hace más y más bulla", dijo Rizzo. "Ganamos el domingo. Sé que estábamos jugando contra las Medias Blancas, nuestros rivales de ciudad, pero ganamos y se hizo bastante bulla. Jugamos ante los Cardenales y se hizo bulla. Yo espero lo mismo cuando regresemos de este receso. He visto videos en YouTube de 2008 y 2003, cuando los Cachorros estaban en la post-temporada, y Wrigleyville era una locura. Estamos emocionados por eso".

Bryant ha amado el corto tiempo que lleva con los Cachorros, especialmente por la conexión que está haciendo con los fanáticos de Chicago.

"Ha sido una locura", apuntó Bryant. "No puedo imaginármelo con más bulla de la que ha hecho en este último par de semanas. Si llegamos a la post-temporada y jugamos en casa, sería bastante especial. Nuestros fanáticos han sido tan geniales. Es bastante fácil jugar al frente de ellos porque te quieren sin importar nada. Tenemos a los mejores fanáticos del béisbol, pienso.

Después de que Rizzo predijo ganar el título de la división central de la Nacional, los Cachorros han completado un récord de 47-40. Están en el tercer lugar de una división cargado, ocho juegos por detrás de los Cardenales y cinco partidos y medio por detrás de los Piratas. Sin embargo, los Cachorros todavía tienen una pequeña ventaja sobre los Mets y Gigantes por el segundo comodín.

Rizzo, de 25 años de edad, ha sido un ancla para el dirigente Joe Maddon. El primera base batea .298 con 16 cuadrangulares, 48 carreras impulsadas, 45 boletos, 19 pegadas de pelota y 12 robos de base.

Pero él ha disfrutado ver a Bryant al igual que ver los números que él mismo está poniendo.

El joven de 23 años de Las Vegas tiene un promedio al bate .269 con 12 jonrones y 51 carreras impulsadas. El novato ha hecho una transición rápida y sencilla a las Mayores, jugando muy bien la tercera base y bateando extra bases cada vez que tiene un chance.

"Este es su segundo año de béisbol profesional", dijo Rizzo. "El cielo es el límite. Veo sus turnos al bate todos los días, bateando por delante o detrás de él. Kris tiene instintos de béisbol. Sabe dónde estar y cuándo estar. Mientras más turnos al bate tenga, mejor será".

Bryant fue promocionado como un bateador de poder pero en estos momentos está proyectado a pegar 22 jonrones, la cual es una cifra modesta para alguien que conectó 9 vuelacercas en 40 turnos al bate, en los entrenamientos primaverales.

No hay necesidad de apurarse. Bryant tiene muchos años por delante para batear jonrones. Su equipo y él apenas están empezando.

"Pienso que tenemos muchísimas ganas de ganar", dijo Bryant. "Estamos estableciendo la cultura de ganar".

Rizzo es uno de los favoritos de Theo Epstein. Él tenía la fe en que los Cachorros iban en la dirección correcta desde que lo adquirieron de los Padres por Andrew Cashner. Cuando Epstein contrató a Maddon como dirigente y a Jon Lester, durante la temporada muerta, fue como si le hubiesen apretado un botón especial al equipo.

"No es ningún secreto que tenemos algo especial", explicó Rizzo. "Todo empezó con Jon Lester viniendo para Chicago. Él pudo haber ido a cualquier equipo y decidió unirse al nuestro. Ganar un campeonato en Chicago significará absolutamente todo. Tenemos el talento y los recursos para hacerlo".

Rizzo tiene un mensaje para el resto de la Liga Nacional: No han visto nada todavía.

"Somos la nueva generación de los Cachorros", dijo Rizzo. "Todos podemos crecer juntos. Todos somos casi de la misma edad. Sabemos que tenemos algo especial. Lo mejor de este equipo está por venir".

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