Vladimir Guerrero quedó a un paso del Salón en su primer año en la boleta

19 de enero de 2017

El dominicano Vladimir Guerrero era poseedor de un talento singular que quedará para el recuerdo. 
Su arsenal de cinco herramientas, su agresivo swing a la derecha y su sonrisa de oreja a oreja… todo eso y mucho más distinguieron a uno de los jardineros más brillantes y de clase única y que ahora parece estar destinado a integrar el Salón de la Fama de Grandes Ligas. 
Simplemente eso no sucedió en su primer año en la boleta. 
Guerrero finalizó en la quinta posición entre los 34 jugadores que integraron la boleta de votación para el 2017 luego que los resultados se dieron a conocer el miércoles, lo que fue un impresionante debut del ex cañonero tras ser nombrado en el 71.7% de las 442 boletas de los votantes elegibles de la Asociación de Cronistas de Béisbol de Norteamérica. Guerrero se encuentra en una excelente posición para alcanzar el 75% de los votos necesarios el próximo año o en los próximos años, de los cuales todavía le restan nueve por aparecer en las boletas. 
El miércoles, Jeff Bagwell (86.2%), Tim Raines (86%) y el puertorriqueño Iván Rodríguez (76%) recibieron los votos suficientes para ser exaltados al llamado Templo de los Inmortales. Trevor Hoffman recibió el 74%, y Guerrero quedó por encima de Edgar Martínez (58.6%), Roger Clemens (54.1) y Barry Bonds (53.8).
"Ho hay duda de que la carrera de Vlad es digna del Salón, y eso es lo importante", dijo Mike Scioscia, quien dirigió a Guerrero con los Angelinos del 2004 al 2009.  
"Creo que el hecho de no haber sido elegido en el primer año en la boleta no es necesariamente algo negativo. Para estar entre ese grupo selecto, a veces se necesita un poco de paciencia. Pero no cabe duda de que llegará".
Los logros de Guerrero en el diamante y el temor que generaba en los mejores lanzadores de la oposición son las cualidades que eventualmente deberían de llevarlo a Cooperstown. 
Guerrero finalizó su carrera con promedio de bateo de .318, porcentaje de embasarse de .379 y .553 de slugging. El quisqueyano conectó 449 jonrones y produjo 1,496 carreras. También acumuló 2,590 hits y anotó 1,328. A principios de su carrera, Guerrero era una seria amenaza en los senderos, prueba de ello son las 40 bases que se estafó en 2002, 37 en 2001 y 181 en toda su carrera. Fue convocado al Juego de Estrellas en nueve ocasiones.
Y en el 2004, en su primera campaña tras haber salido de Montreal y firmado con los Angelinos como agente libre, Guerrero fue reconocido como el Jugador Más Valioso de la Liga Americana con números ofensivos de .337/.391/.598, 39 cuadrangulares, 126 carreras empujadas y 124 anotadas, 39 dobles y 15 bases robadas. También tuvo una línea ofensiva de .363/.424/.726 con 11 vuelacercas y 25 carreras producidas en el último mes de esa temporada mientras encaminaba a su club a ganar el Oeste del Joven Circuito. 
"Con Vlad, era mucho más que sólo números", declaró el ex compañero de Guerrero con los Angelinos, Darin Erstad. "Era la manera en que lo hacía. Era talento puro, poseedor de una increíble coordinación mano-ojo que uno jamás haya visto. Era como que cada día en el parque veías algo que nunca antes jamás habías visto".
El ex ligamayorista Rex Hudler, quien cubrió a Guerrero como cronista de los Angelinos antes de trabajar en Kansas City, describió la zona de strike de Guerrero como "una que abarcaba desde sus dedos de los pies hasta su nariz". Ningún pitcheo estaba a salvo del bate de Guerrero, quien se destacaba por su amplio swing y por tener unas rápidas muñecas. 
"Sé que eventualmente será reconocido con ese gran honor", aseguró Scioscia. "Creo que no hubo otro jugador más dominante por tan largo período de tiempo como lo fue Vlad en ambas ligas, y su talento es evidente cuando comparas algunos de sus logros con los más grandes peloteros de todos los tiempos.
"Estoy seguro de que llegará al Salón".