El cubano Yordan Álvarez empezó la temporada del 2019 destruyendo la Liga de la Costa del Pacífico, en la que bateó .343/.443/.742 con 23 jonrones en 56 juegos por Triple-A Round Rock.

Los Astros finalmente lo subieron el 9 de junio, un par de semanas antes de que cumpliera 22 años y a poco menos de tres años después de haberlo adquirido en un cambio con los Dodgers por el relevista Josh Fields. Aquel día, en su debut en las Grandes Ligas, Álvarez jonroneó ante los Orioles. En su siguiente partido, la botó contra los Cerveceros.

Desde entonces, Álvarez no ha parado de batear. Y los resultados son históricos.

Su juego de tres jonrones y siete empujadas el sábado pasado en Baltimore fue la más reciente advertencia para aquellos que no han estado prestando atención. Y la serie ante los Medias Blancas que concluyó el miércoles, en la que dio un solo hit en 11 turnos, son un significativo bache para sus estándares.

Houston inicia una nueva serie la noche del jueves en Oakland, y si Álvarez está en el lineup, será su juego 50 en MLB. También será la conclusión de lo que podrían ser los mejores primeros 50 encuentros para un bateador en los últimos 80 años.

Se trata de una aseveración arriesgada, pero tras sus primeros 49 juegos, Álvarez tiene una línea ofensiva de .339/.422/.694, lo que produce un wRC+ (una estadística que agarra el aporte global ofensivo de un jugador y lo ajusta de acuerdo con el parque en el que juega dicho jugador) de 190, o 90% mejor que el promedio de MLB. Ha conectado 14 dobles y 17 jonrones, además de empujar 52 carreras.

Entre los 300 jugadores que han sumado al menos 200 visitas al plato este año, Álvarez es segundo en promedio de bateo y porcentaje de embasarse, y primero en slugging, OPS y wRC+. Claro que otros que aparecen en esos lideratos como Mike Trout, Cody Bellinger y Christian Yelich han tenido más del doble de sus visitas al plato, pero de cualquier manera se trata de una impresionante compañía.

Además, ningún bateador en la historia reciente ha puesto números más contundentes en sus primeros 50 partidos, de acuerdo con un análisis de MLB.com.

Mejor OPS, primeros 50 juegos de por vida

Mínimo 150 visitas al plato, desde 1940

1. Yordan Álvarez (2019 HOU): 1.113 (tras 49 choques)

2. Willie McCovey (1959 SF): 1.110

3. Albert Pujols (2001 STL): 1.104

4. Bernie Carbo (1969-70 CIN): 1.089

5. Gary Sánchez (2015-16 NYY): 1.067

6. Tony Oliva (1962-64 MIN): 1.061

7. Fred Lynn (1974-75 BOS): 1.046

8. Ryan Braun (2007 MIL): 1.044

9. Alvin Davis (1984 SEA): 1.042

10. Bob Hazle (1955-58^): 1.039

^Jugó para CIN, MLN, DET

Ahora bien, un inicio así de bueno en el plato no es garantía de nada. Pero McCovey es un miembro del Salón de la Fama y Pujols también lo será. Braun ha tenido una carrera larga y productiva, similar a las de Lynn y el cubano Oliva, que se retiraron con más de 40 de WAR. Carbo y Davis fueron bateadores sólidos, aunque no se mantuvieron al nivel que pusieron en sus respectivas temporadas de novatos. El tiempo dirá qué será de la carrera del dominicano Sánchez, quien ha tenido sus bajos y altos hasta ahora entre dos convocaciones al Juego de Estrellas.

(Hazle es un caso particular, pues sólo jugó 110 encuentros de por vida por culpa de las lesiones después de su excelente, pero recortada temporada de 1957 con los Bravos).

Álvarez también se convirtió en uno de apenas ocho cañoneros en la historia de Grandes Ligas en dar al menos 17 bambinazos en sus primeros 50 juegos. Sus 52 empujadas son la cuarta mayor cantidad en ese mismo lapso, sólo detrás del Novato del Año de la Liga Americana en 1950, Walt Dropo (57), y otros dos nombres bien conocidos: Joe DiMaggio (55) y Ted Williams (54).

The numbers above aren’t park- and league-adjusted, and Alvarez is flourishing at a time when home runs are flying across baseball, with the MLB-wide slugging percentage the highest its been in any season other than 2000.

That may be giving his numbers a bit of a boost in comparison to some players of the past, but there is plenty behind Alvarez’s results to suggest more good things to come.

• Despite being a rookie and a powerful slugger, Alvarez’s strikeout rate is only slightly above the MLB average, and his whiff rate on swings is actually lower than average -- similar to those of Cody Bellinger, Manny Machado, Rafael Devers and Freddie Freeman. His walk rate is above average.

• When Alvarez makes contact, it’s quality contact. His average exit velocity and hard-hit rate both rank in the top 20 among MLB hitters with at least 100 batted balls this season, according to Statcast. The left-handed-hitting slugger stands among the MLB leaders since his debut with 13 balls hit at 110 mph or harder, including five home runs. A blast he hit in Houston off Rangers lefty Mike Minor left his bat at 112.2 mph and set an Astros Statcast record by flying a projected 474 feet.

• Antes de una rara exhibición el miércoles en la que dio tres rodados, Álvarez estaba entre los 10 mejores en las Mayores dando líneas o elevados en el 61.8% de las bolas que ponían en juego. Eso lo ayudó a producir 24 “macetazos”-- batazos con la óptima combinación de velocidad de salida y ángulo de despegue—y ubicarse entre los 10 mejores en MLB desde su debut.

• Álvarez les ha bateado tan bien a los zurdos como a los derechos, y ha tenido éxito ante más que rectas. De sus 17 cuadrangulares, 11 han sido contra envíos rompientes o lentos, y el cubano tiene un slugging superior a .800 ante ese tipo de ofrecimientos.

Si esas tendencias sirven como indicativo, Álvarez podría convertir esos primeros 50 partidos en una histórica campaña de novato. Álvarez, quien podría ser ya el favorito para ser Novato del Año de la Americana, tiene ahora mismo la mejor actuación en términos de wRC+ para un novato en la era moderna del béisbol:

Mejor wRC+ en la historia en una temporada para un novato

Mínimo 200 visitas al plato, desde 1900

1. Yordan Álvarez (2019 HOU): 190

2. Willie McCovey (1959 SF): 185

3. Joe Jackson (1911 CLE): 184

4. Frank Thomas (1990 CWS): 178

5. Aaron Judge (2017 NYY): 172

La liga siempre encuentra la forma de ajustarse. Quizás la serie en Chicago haya sido el inicio de eso, y Álvarez tendrá entonces que encontrar la manera de responder el golpe.

Pero por ahora, el nativo de Las Tunas se encuentra en un territorio bien exclusivo. Y los punteros Astros están disfrutando de todo ese éxito.