De todas las reacciones al anuncio que hicieron los Tigres la semana pasada, cuando dijeron que iban a acercar y bajar algunas de las paredes de los jardines del Comerica Park, ninguna generó tanta atención como la del venezolano Miguel Cabrera.

“Ahora quiero jugar más años”, bromeó Cabrera en Instagram, poniendo además unos emojis de risas.

La reacción era esperable, considerando lo mucho que se ha utilizado el caso de Cabrera como ejemplo del impacto que tiene Comerica Park en los bateadores de poder.

“Deberías ver sus números”, dijo Nick Castellanos sobre Cabrera en el verano del 2019, una semana antes de que fuese cambiado. “Si pudiese jugar en algunos de esos estadios donde juegan otros muchachos, imagínate cómo serían sus números. Pienso que dice mucho de lo especial que es este hombre”.

A lo largo de los años, son muchos los que se han preguntado cómo lucirían los números de Cabrera en un estadio más pequeño. Así que cuando se conoció la noticia del cambio de dimensiones en Comerica, naturalmente muchos empezaron a preguntarse qué impacto habrían causado estos ajustes en los números de Cabrera si se hubiesen implantado antes.

Y gracias a los datos y videos disponibles gracias a Statcast y Baseball Savant, pudimos dar un vistazo.

Algo para tener en cuenta es que, incluso con estos cambios, Comerica Park sigue siendo un parque grande. Así que si bien mover la cerca del jardín central de 422 pies – resulta que tenía dos pies más de lo que decía el letrero todos estos años – a 412 pies pareciese ser significativo, eso no convierte al estadio en un paraíso para dar jonrones.

Cabrera tuvo sólo dos outs con batazos de 412 pies o más en Comerica desde que Statcast empezó a registrar cada movimiento en cada juego de Grandes Ligas en el 2015. Uno fue este out de 423 pies un poco a la derecha de la pared del central, donde Austin Jackson tomó la bola en la zona de seguridad:

La otra fue un poco a la izquierda, y allá fue a atraparla Byron Buxton de los Mellizos justo antes de la pared y a 416 pies del home:

Cabrera tuvo otras tres conexiones de 410 pies o más que se quedaron dentro del parque y terminaron siendo hits, incluyendo este doble de 412 pies contra la cerca del center field ante los Mellizos el 29 de agosto del 2020:

Esas son las bolas al jardín central que quizás hubiesen sido afectadas por acercar la pared 10 pies. Igual de importante es el cambio en el jardín central-derecho, donde la pared que incluye la pizarra con los marcadores de otros juegos será acercada por dos pies y bajará en estatura a siete pies. 

El jardín central-derecho atormentó a Cabrera durante gran parte de su tiempo en Detroit, dado su tendencia a mandar la bola con autoridad a la banda contraria. Aquí está un batazo de 411 pies contra Zach McAllister de Cleveland que rebotó contra la parte de arriba de la pared que resultó, lo que hizo que Cabrera fuese atrapado en la segunda base:

Una vez que te trasladas al bosque derecho y le das un vistazo a los batazos a la banda contraria que quizás hubiesen sido cuadrangulares con una pared más baja, se convierte en algo más subjetivo. Aquí tienen un sencillo largo contra el cubano Néstor Cortés el 10 de septiembre del 2019, que tuvo una trayectoria de 374 pies según Statcast, pero que chocó justo arriba del letrero de 365 pies en el derecho:

Dos días después, Cabrera conectó otra bola alta contra el muro del jardín derecho, esta vez más cerca de la esquina. Statcast la midió a 348 pies, pero con una pared más corta, quizás hubiese salido:

Probablemente haya algunos otros hacia la esquina del jardín derecho, como este doble de 333 pies la pasada temporada – aunque este fue cerca de las cámaras del jardín derecho, la única área donde el muro no tendrá seis pies de alturas cuando se terminen los cambios:

Tengan en mente también que no hubo Statcast durante las primeras siete campañas de Cabrera como integrante de los Tigres, el mejor trecho de su carrera, incluyendo su temporada de Triple Corona en el 2012. La imagen que muestra dónde cayeron todos sus hits de esa temporada y el 2013 muestra varios doble cerca o contra cercas, aunque no todos fueron en el Comerica Park.

Ya tienen una idea. Estas nuevas dimensiones no hubiesen marcado una gran diferencia en el total de cuadrangulares de Cabrera si hubiesen estado ahí en un principio, pero si hubieran cambiado un poco las cosas. El cañonero comenzará la temporada del 2023 en el 27mo lugar en la lista de jonrones de todos los tiempos con 507, dos detrás de su ex compañero de equipo Gary Sheffield, y apenas cuatro bambinazos detrás del Salón de la Fama Mel Ott. Con solamente seis vuelacercas más, Cabrera ocuparía el 23er lugar. El puesto número 20 le queda un poco más lejos: Ted Williams, Willie McCovey y Frank Thomas están empatados con 521.

Cabrera conectó apenas cinco jonrones el año pasado, cuatro de ellos en el Comerica Park. Disputará solamente una temporada con las nuevas dimensiones y será a sus 40 años. Pero como señaló Castellanos, el hecho de que Cabrera conectó tantos bambinazos jugando toda su carrera en estadios grandes en Miami y Detroit solamente hace más grande su leyenda.