Oliva con otra oportunidad para el Salón

3 de diciembre de 2021

Este domingo, el Early Baseball Committee (antes de 1950) y el Golden Era Committee (1950-69) emitirán sus votos en boletas con 10 jugadores cada una. Los resultados serán anunciados esa noche a las 8 p.m. ET por MLB Network.

Uno de los considerados es el cubano Tony Oliva, quien tuvo una brillante carrera entre 1962 y 1976. De por vida, bateó .304/.353/.476, con 1,917 hits, 220 jonrones, 947 empujadas y 86 bases robadas.

La última vez que Oliva fue considerado para ser exaltado al Salón de la Fama, por el Golden Era Committee en el 2014, se quedó a un voto de ganarse un lugar en Cooperstown.

Oliva, quien tiene 83 años, tendrá ahora otra oportunidad de ingresar, 45 años después de la última temporada que jugó en las Grandes Ligas.

Jardinero y bateador zurdo, Oliva jugó 15 campañas en las Mayores, todas con los Mellizos. Y durante gran parte de esos años, no paró de batear.

Parte de la nueva ola de estrellas cubanas que siguieron los pasos de Oréstedes “Minnie” Miñoso – otro jugador en la boleta del Golden Days Committee este año -- Oliva debutó con Minnesota en 1964 y se convirtió en un perenne invitado al Juego de Estrellas y candidato a JMV.

Problemas en las rodillas afectaron a Oliva en la parte final de su carrera, pero por casi una década, estuvo entre los mejores bateadores del juego. Aquí, los dejamos con algunas de las razones por las cuales Oliva podría entrar al Salón de la Fama en esta oportunidad.

Casi es JMV en varias ocasiones

Luego de terminar cuarto en la votación del JMV de la Americana en 1964, Oliva estuvo aun más cerca de llevarse el galardón el año entrante, cuando los Mellizos ganaron el banderín del Joven Circuito y enfrentaron a los Dodgers en la Serie Mundial.

Terminó segundo en la votación -- detrás de su compañero de equipo y compatriota, Zoilo Versalles – luego de llevarse su segundo título de bateo seguido con promedio de .321 y encabezar una vez más la Americana en hits (185). El toletero también terminó segundó en 1970, escoltando a Boog Powell de los Orioles.

Fue ocho veces seguidas al Juego de Estrellas

Oliva fue presencia fija en el roster de la Americana para el Juego de Estrellas entre 1964 y 1971, siendo seleccionado en cada año en esas ocho temporadas e iniciando en tres ocasiones como parte del lineup abridor.

Fue durante ese tiempo que puso sus mejores números como ligamayorista, con promedio de bateo de .313, 1,455 hits, 177 cuadrangulares, 278 dobles y OPS de .867 (OPS+ de 140).

Sólo Pete Rose, Lou Brock, Billy Williams y el puertorriqueño Roberto Clemente conectaron más imparables que Oliva en ese lapso, y nadie dio más dobletes. El patrullero de los Mellizos también se ubicó tercero en promedio de bateo y 13ro en OPS+ (mínimo de 3,000 visitas al plato) en ese lapso de ocho años.

Lideró la L.A. en hits en cinco ocasiones y se alzó con tres coronas de bateo

Después de ganar el título de bateo en cada una de sus primeras dos temporadas, Oliva consiguió el tercero y último de su carrera en 1971 con un promedio de .337.

En la historia de la L.A./L.N., Ty Cobb (8), Tony Gwynn (7), Rose (7), Suzuki (7) y Stan Musial (6) son los únicos jugadores que han encabezado a sus ligas en hits más veces que Oliva, que lo hizo en 1964, 1965, 1966, 1969 y 1970.

Luego de que su carrera como jugador llegó a su fin, Oliva se convirtió en coach con los Mellizos y fue instructor de bateo del club que ganó la Serie Mundial de 1987 y coach de la banca del que se coronó en 1991. Como resultado, Oliva es el único individuo que tuvo un rol en el terreno – bien sea como jugador o coach – en cada uno de los tres viajes que han hecho los Mellizos a la Serie Mundial.

Los Mellizos retiraron el número 6 de Oliva durante la campaña de 1991 y él fue parte del grupo inaugural de su Salón de la Fama en el 2000, junto al panameño Rod Carew, Harmon Killebrew, Kirby Puckett, Kent Hrbek y Calvin Griffith. Ahora, Oliva tiene una nueva oportunidad de unirse a Carew, Killebrew y Puckett en Cooperstown.