Luis Robert listo para continuar su desarrollo en el sistema de White Sox

4 de octubre de 2018

GLENDALE, Arizona -- Si el cubano Luis Robert hubiese estado saludable, sus números seguramente hubiesen sido mejores que el .269 de promedio con 17 carreras empujadas, 11 dobles, 15 bases robadas y .694 de OPS, sin jonrones, que dejó en ligas menores sumando sus paradas en Categoría Novtos, Clase A Kannapolis y Clase A Avanzada Winston-Salem.
Al pelotero de 21 años se le atravesaron un par de lesiones de ligamentos en el pulgar izquierdo que limitaron su actuación a 50 juegos y 186 turnos. Pero en su primera temporada profesional en Estados Unidos, ajustarse a un nuevo estilo de vida fue tan importante para el 44to mejor prospecto de todo el béisbol y número cuatro en el sistema de los White Sox como tratar de arreglárselas ante el pitcheo de las ligas menores.
"Bueno, hablando de las cosas fuera del terreno, yo no creo que fue una mala temporada para mí", dijo Robert esta semana durante un mini-campamento en Camelback Ranch. "Aprendí mucho y me tuve que adaptar a muchas cosas dentro y fuera del terreno".
"Obviamente la parte de los números no estuvo tan bien, y las cosas no me salieron como yo quería por las lesiones. Pero en general fue un buen año para mí".
Los ajustes de los que habló Robert podrían parecer cosas secundarias para la mayoría de los peloteros. Pero no para alguien recién llegado de Cuba. Incluyeron tener que jugar todos los días, o jugar de día tras largos viajes en autobús, además de adaptarse a una cultura y comidas diferentes.
En cuanto al béisbol, Robert recuperará parte del tiempo perdido jugando con los Glendale Desert Dogs en la Liga Otoñal de Arizona. Sus habilidades naturales deberían impresionar a aquellos fanáticos que no han visto previamente al jardinero central.
"Obviamente, tiene un talento que se pierde de vista", dijo Aaron Rowand, coordinador de outfielders y corrido de bases de los White Sox en las menores. "Se mueve a un ritmo diferente".
"Bien sea tomando un rodado o corriendo detrás de un elevado, tiene la habilidad de moverse rápidamente, pero siempre en control de su cuerpo. Sus pies siempre están bien plantados. Eso es algo que no se enseña. Cuando toma un batazo por el suelo y se prepara para lanzar, siempre está en control, pero a un ritmo más rápido que la mayoría".
"Eso es talento, simplemente. Eso te lo da Dios. Tiene un cañón en el brazo. Trabaja tanto o más que cualquiera. Mueve muy bien los pies. Sus instintos corriendo son muy buenos. Lee bien los batazos. Para lo joven que es, es un pelotero muy avanzado que irá mejorando con la experiencia".
El poder de Robert se vio coartado por dolores en la muñeca mientras compensaba por los problemas en el pulgar, lo que le hacía difícil extender su swing. Pero ya está recuperado y espera estar pronto al tope.
Quiénes están cerca de Robert tienden a pensar que es un asunto de cuándo empezará a alcanzar todo su potencial, y no de si será capaz de hacerlo.
"Pudo tomar algunos turnos, pero queremos que siga trabajando en lo que ha venido haciendo aquí en la Liga Otoñal", dijo Chris Getz, director de desarrollo de personal de los White Sox. "Después de eso podremos hacer una mejor evaluación y tener una mejor idea de qué puede aportar al equipo a partir del 2019".
"Definitivamente las cosas que hice bien fueron correr las bases y mi defensiva", dijo Robert. "Pero aprendí muchas cosas que me van a ayudar en el futuro".