Boone con un inicio sin precedente en Yankees

21 de agosto de 2019

Incluso si los Yankees terminan este año con récord de 17-18 en sus últimos 35 juegos, volverán a ganar 100 juegos una vez más bajo el mando de Aaron Boone, el manager novato que tomó el mando del club el año pasado tras llegar directamente al dugout desde la cabina de transmisión de ESPN. ¿Saben cuántos managers de los Yankees han ganado 100 juegos en cada una de sus primeras dos temporadas?

Ninguno lo ha hecho.

Nadie mejor que el propio Boone entiende lo que está en juego para los Yankees, por irrealistas que puedan lucir muchas veces esas expectativas. Siempre existe la idea, al menos en Nueva York, de que para los Yankees es Serie Mundial o fracaso, aunque hayan ganado una sola vez el Clásico de Octubre desde el año 2000. Boone bateó uno de los jonrones más famosos en la historia de los Yankees, aquel inolvidable cañonazo en la parte baja del 11mo inning del Juego 7 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana contra los Medias Rojas en el viejo Yankee Stadium en el 2003.

Boone y sus compañeros perdieron luego la Serie Mundial en seis juegos contra los Marlins. Los fanáticos de los Yankees siempre recordarán el cuadrangular de Boone. Pero recuerdan todavía mejor que los Yankees perdieron una Serie Mundial que todo el mundo esperaba que ganaran.

Boone viene de una familia de béisbol, por supuesto. Su abuelo, Ray, jugó 13 temporadas en las Grandes Ligas y empujó 116 carreras un año por los Tigres y 114 otra temporada en la que jugó con Indios y Tigres. El padre de Aaron, Bob, un receptor, disputó 19 temporadas en las Mayores y luego dirigió a los Reales y los Rojos.

“Ponlo de esta manera”, me dijo Reggie Jackson luego de que los Yankees contrataron a Aaron Boone. “Aaron conoce el trabajo, aunque no haya hecho el trabajo”.

Ya puede decirse que ha hecho un gran trabajo. Y salvo un descalabro de los Yankees, van a ganar más juegos de los que ganaron en el 2018. Y Boone habrá ganado 100 partidos en cada una de sus primeras dos campañas.

Miller Huggins nunca hizo eso. Tampoco lo lograron Joe McCarthy, Bucky Harris, Casey Stengel, Ralph Houk ni Joe Torre. Aunque todos ellos lograron ganar la Serie Mundial, incluso Harris, quien estuvo sólo dos años en los Yankees antes de darle paso a Stengel. Queda por ver si los Yankees de Boone podrán hacer lo mismo.

Pero en la historia del equipo, solamente estos tres managers han tenido dos temporadas seguidas con al menos 100 triunfos en su carrera en los Yankees: Huggins. McCarthy. Torre. No está nada mal esa compañía.

“Aaron era el candidato sorpresa que simplemente llegó y nos impresionó a todos”, dijo Cashman el lunes sobre el proceso de entrevistas para contratar a su dirigente.

Todos esos managers fueron contratados para coronarse, y todos lo hicieron. Stengel ganó cinco Series Mundiales en fila entre 1949 y 1953. Los Yankees de Houk ganaron la Serie Mundial de 1961 y 1962 y luego perdieron la de 1963, cuando fueron barridos por los Dodgers. Los Yankees de Torre ganaron el Clásico de 1996, cayeron en la Serie Divisional de 1997 y posteriormente se titularon tres veces en fila. Y casi ganan cuatro seguidas de no ser por la remontada de los D-backs en el cierre de la novena entrada del Juego 7 en el 2001.

Los Yankees perdieron la SDLA ante los Medias Rojas la temporada pasada, luego de que Boston había ganado 108 juegos en la ronda regular. Los Patirrojos también tenían un manager novato, el puertorriqueño Alex Cora, quien venía de sentarse al lado de A.J. Hinch cuando los Astros ganaron la Serie Mundial del 2017. Boone venía de sentarse junto al narrador Dan Schulman y la analista Jessica Mendoza en la caseta de transmisión.

Pero si los Yankees juegan, digamos, para 23-13 el resto del camino, terminarán la campaña con 105-57. Así, la marca de Boone en la campaña regular sería de 205-119, exactamente la misma con la que empezó Houk.

De todos los dirigentes que hemos nombrado aquí, sólo Houk no había dirigido en las Mayores antes de llegar a Nueva York. Había piloteado en Triple-A antes de ser coach de Stengel. Boone no había dirigido en ninguna parte. Ahora está sentado en el medio del fuego. Tiene que ser nombrado Manager del Año de la Liga Americana por todo lo que ha hecho su equipo a pesar de haber tenido a más de dos docenas de jugadores en la lista de lesionados. Y si usted sabía que DJ LeMahieu y Gio Urshela iban a ser los mejores dos peloteros en el equipo con el mejor récord del béisbol a mediados de agosto, por favor levante la mano.

El calendario se pondrá un poco más complicado ahora, con juegos en Oakland y luego en Los Ángeles ante los Dodgers. Los Yankees siguen luchando, tratando de asegurar la ventaja de localía para la postemporada, recordando que en la SCLA del 2017 ganaron todos en casa ante los Astros, pero perdieron los cuatro en Houston.

“Queremos ganar todos los partidos que podamos”, aseguró Boone el domingo.

Han ganado un montón bajo su mando. Su récord como piloto de los Yankees es de 183-106. Su equipo va a ganar una centena una vez más. Y luego Boone tendrá la oportunidad de hacer lo que consiguieron todos esos legendarios pilotos de los Yankees: Ganar en octubre.