Muchos fans de los Yankees están preocupados por el arranque del equipo en estos primeros nueve partidos que han disputado, con un balance de 4-5 los Bombarderos están en segundo lugar de la División Este de la Liga Americana, empatados con los Azulejos de Toronto, los Rays de Tampa Bay y los Orioles de Baltimore y a dos partidos de los Medias Rojas de Boston.

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A los que gustan de las estadísticas, un dato curioso y a la vez alentador, es que los Yankees en 18 de las 48 apariciones que han tenido en el Clásico de Otoño, iniciaron la campaña con un récord de cinco victorias o menos en sus primeros nueve juegos. De hecho, cinco veces han tenido igual o peor récord que el actual 4-5 y en todas se han llevado el anillo.

En 1978, año donde Bucky Dent pegó su inolvidable jonrón y donde los Bombarderos se impusieron a los Dodgers en seis partidos, los Yankees comenzaron la temporada con el mismo balance de ganados y perdidos que ostentan hoy. Esto también paso en 1962, donde derrotaron en siete encuentros a los Gigantes en la Serie Mundial, luego en 1952, donde vencieron a los Dodgers de Brooklyn y el mismo arranque en 1938, temporada en la que terminaron barriendo a los Cachorros en la final.

La única vez que los Yankees iniciaron peor que en este 2021 y ganaron el Clásico de Octubre, fue en 1977, una temporada icónica donde todos recuerdan los tres bambinazos de Reggie Jackson contra los Dodgers en la final y un año que quedo muy bien reflejado en la Serie de Televisión: The Bronx is Burning.

¿Qué necesitan hacer los Yankees para encontrar la primera racha ganadora del año?

Quizás un cambio en la parte alta de la alineación. Si bien, D.J LeMahieu y Aaron Judge tienen promedios ofensivos por encima de .290, Hicks como tercer bate no ha producido como se espera y tampoco lo ha hecho Gleyber, quien ha sido mi candidato ideal para ese puesto una vez despierte. Si vamos con numeritos de este 2021, Gardner y Urshela han estado muy bien con el madero y basados en los rendimientos actuales, una novena con Gardner, Judge, LeMahieu, Stanton, Sánchez, Urshela, Torres, Hicks y Odor no parece descabellada. Esto sería una estrategia temporal con la que el bate de Torres de séptimo y Hicks de octavo, pudieran despertar, para finalmente ocupar los lugares que deben tener en la alineación.

Definitivamente el bate de Luke Voit es más que necesario en estos momentos, pero el reporte de salud del inicialista Yankee, indica que su regreso pudiera ser a mediados de mayo, ya que todavía se recupera de una ruptura parcial del menisco de su rodilla izquierda. Esta es una situación que los Bombarderos necesitan resolver de alguna manera y la llegada de Odor a los Yankees es una de las estrategias que tomo la gerencia, pues LeMahieu puede jugar en la primera base, dejando a Odor en la intermedia, aunque Bruce todavía tiene la oportunidad de pelear por más turnos ofensivos.

La temporada de Grandes Ligas es de 162 juegos desde 1961 y esto indica que quedan 153 partidos por jugarse para los Yankees. Muchas cosas pueden pasar en las próximas jornadas y aunque la ansiedad invade a los fans de los Bombarderos del Bronx que no ven un título desde el 2009, queda demasiado béisbol por jugarse y al menos la historia, en un buen porcentaje, respalda a los vestidos a rayas.