Kershaw enfrentó un reto difícil en una situación desconocida... y respondió en grande
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LOS ÁNGELES -- Clayton Kershaw ha lanzado 18 temporadas en una carrera que lo tiene encaminado a Cooperstown. Ha ganado el Cy Young, títulos de efectividad y un JMV. Ha ponchado a más de 3,000 bateadores y actualmente está buscando un tercer anillo de Serie Mundial antes de retirarse cuando finalice esta campaña.
Si esta fue la última vez que vimos a Kershaw en un montículo, podría haber coronado su ilustre carrera con el out más importante que jamás haya registrado.
El Juego 3 de la Serie Mundial fue un clásico instantáneo: una victoria por 6-5 de los Dodgers en 18 entradas la noche del lunes en el Dodger Stadium, dándole a Los Ángeles una ventaja de 2-1 en la serie.
En general, fue una brillante actuación de un bullpen de los Dodgers muy criticado, que sacó los últimos 40 outs del juego, permitiendo solo una carrera. El out de mayor presión le correspondió a Kershaw.
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En la parte alta del 12mo inning, los Azulejos llenaron las bases contra el derecho Emmet Sheehan. Con Nathan Lukes como siguiente bateador —y el dominicano Vladimir Guerrero Jr. esperando en el círculo de espera— el juego pendía de un hilo. El manager de los Dodgers, Dave Roberts, llamó al zurdo Kershaw para enfrentar al zurdo Lukes.
“Solo estaba tratando de entrar y conseguir un out”, dijo Kershaw. “Definitivamente es algo que no he hecho mucho. Pero solo tratas de hacer tu trabajo y lo que se te pide. Agradecido de conseguir un rolling por ahí”.
De hecho, después de una batalla de ocho lanzamientos, Lukes bateó un rodado inofensivo a Tommy Edman en segunda base. Los Azulejos no volverían a amenazar realmente hasta que pusieran a dos hombres a bordo en la 18va entrada.
Kershaw no podía recordar haber entrado alguna vez a un juego en extrainnings. No podía recordar haber entrado alguna vez a un encuentro con las bases llenas. Nunca ha hecho ninguna de esas cosas en las Grandes Ligas.
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“Fue un out importante para nosotros”, resumió Kershaw. “Pensé que iba a ser un out más importante, pero jugamos como nueve innings más”.
Seis más, para ser exactos. Freddie Freeman conectó un jonrón de oro en la parte baja del 18vo episodio, dejando a Kershaw a dos victorias de ese tercer anillo (y del retiro).
Toda la postemporada, Kershaw ha hecho todo lo posible por mantener el sentimentalismo a raya. En primer lugar, tiene un trabajo que hacer, y, naturalmente, esa fue su mentalidad la noche del lunes.
“No estoy pensando en el final”, insistió Kershaw. “Solo estoy tratando de sacar a ese hombre. Sí, ¿después del hecho? Es muy divertido tener éxito cuando sabes que estás cerca [de retirarte]”.
La actuación más reciente de Kershaw fue en el Juego 3 de la SDLN, cuando fue castigado por los Filis. Ese habría sido un final sin ceremonias para quizás el mejor lanzador de su generación. ¿Esto? Ciertamente se sentiría un poco más como un cuento de hadas.
Por otra parte, después de que el bullpen de los Dodgers trabajara 13.1 entradas el lunes, Kershaw es actualmente uno de los brazos más frescos del grupo, lo que hace significativamente más probable que consiga más trabajo en esta Serie Mundial.
“Tengo [a lo sumo] cuatro veces más para intentar prepararme”, dijo Kershaw con una sonrisa. “Y esa es una buena sensación, también, honestamente.”