La 'navaja suiza' de L.A. ha desarmado a los Cerveceros
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LOS ÁNGELES – Antes del comienzo de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, los Cerveceros, dueños del mejor récord del béisbol en la temporada regular, se presentaban como una especie de ‘navaja suiza’.
Un equipo que podía hacerlo todo. Podían vencerte con contacto, robos de base, un bullpen blindado, un posible finalista del Premio Cy Young, una sólida defensa, y, de ser necesario, con poder. Un equipo de béisbol con buenos fundamentos.
Pero ahora, son los Dodgers los que parecen haber absorbido esa virtud.
Sí, la rotación ha estado a alturas históricas en esta serie. Lo hecho por Blake Snell, Yoshinobu Yamamoto y Tyler Glasnow es la razón principal de que Los Ángeles está a un triunfo de la Serie Mundial, luego de vencer por tercer partido consecutivo a Milwaukee 3-1 el jueves en el Juego 3 de la SCLN en el Dodger Stadium.
Pero este equipo va más allá. Aun en un día que comenzó con Shohei Ohtani despertando del letargo con un triple para iniciar el partido, seguido por un doble de Mookie Betts, en realidad fue Tommy Edman quien impulsó la carrera de la ventaja, un error en tiro bien aprovechado y una decisión rápida a la defensiva de Max Muncy lo que definió el partido.
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Vaya, la adquisición más importante de la agencia libre está cerrando juegos. No hay nada que describa mejor la flexibilidad de la tropa de Dave Roberts que eso.
"[Mookie Betts] ha hecho grandes jugadas”, explicó Roberts, sobre una jugada de circo del torpedero para sacar el primer out de la novena entrada, con Sasaki en la loma. “Esa jugada yendo a su mano de revés para permitir que Roki [Sasaki] se asentara... Simplemente continúa haciendo grandes jugadas. Con razón está en la conversación del Guante de Oro en el campocorto".
"Más temprano, esa jugada de Muncy fue tremenda”, continuó. “Con el infield adentro, yendo a su izquierda, girar y hacer un tiro preciso para conseguir ese out en home, esa también fue una gran jugada".
En ese momento, los Cerveceros tenían hombre en tercera con un solo out en el segundo inning, con la oportunidad de irse arriba a 90 pies, oportunidad que decapitó Muncy con la que, según el abridor Glasnow, fue la jugada del día.
"Fue enorme. Fue la jugada del partido, sin duda”, señaló el monticular. “La historia sería diferente. Creo que justo después de eso, el alivio de ese inning, con él haciendo esa gran jugada, me permitió volver a salir y simplemente tratar de mantenerme en la zona y conseguir outs rápidos. Pero fue una enorme. Hizo un gran trabajo".
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En el lado ofensivo, incluso con lo hecho por Ohtani y Betts en el primer inning, la producción del club sigue recayendo en gran parte en la parte final del lineup.
En esta serie, los bateadores que van del primero al cuarto puesto batean .178/.339/.356 con cuatro extrabases, mientras que los que van de cinco al nueve tienen .300/.375/.500 con seis batazos de dos o más bases.
“Tenemos un equipo aquí lleno de muchachos que van a dar un paso adelante si lo necesitamos”, dijo el venezolano Miguel Rojas sobre el apoyo a Ohtani y al resto de las superestrellas del club. “Y hasta que él vuelva a ser él mismo y recupere su forma, creo que vamos a estar bien”.
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Incluso el bullpen, que poco ha sido utilizado en esta serie, cuando Roberts ha necesitado acudir a ellos, han respondido. De haber tropezado en el Juego 1, cuando Milwaukee estuvo a punto de empatar el choque en el noveno capítulo, o hubiese tambaleado el jueves después de Glasnow, la historia sería diferente.
“Nuestros muchachos están probados en batalla”, comentó el manager sobre el relevo. “Saben que nunca he perdido la fe en ellos. Nunca han perdido la confianza entre sí. Así que ver lo que están haciendo ahora mismo, no me sorprende. Sabíamos desde el principio que íbamos a necesitar a estos muchachos. Y están cumpliendo. El bullpen merece mucho crédito".
Pero ahora, el club está a las puertas de hacer algo que no se ve en la Liga Nacional desde los Filis del 2009, cuando Los Ángeles busque un triunfo más para asegurar su segundo banderín consecutivo del Viejo Circuito.
Y han llegado hasta aquí de maneras que probablemente pocos pensaban hace unos meses.