Los veteranos de los Astros han brindado un elemento crucial en el 2017

HOUSTON -- Uno de los temas a seguir en los Astros de Houston desde el invierno del 2016-17 era la llegada de veteranos como el puertorriqueño Carlos Beltrán, Brian McCann y Josh Reddick, para acompañar un roster joven de los "siderales" que bajó a 84 victorias la temporada pasada tras avanzar a la Serie Divisional de la Liga Americana en el 2015.
Beltrán y Reddick firmaron como agentes libres, a la vez que McCann llegó vía un canje con los Yankees para abrirle el camino en el Bronx al receptor dominicano Gary Sánchez.
Rumbo a 101 victorias en la campaña regular, un título del Oeste de la Americana y un triunfo sobre los Medias Rojas en la primera ronda de los playoffs, el trío antes mencionado puso de su parte dentro y fuera del terreno. 
"Fue algo grande para nosotros", dijo el torpedero de los Astros, el boricua Carlos Correa. "El año pasado teníamos un buen equipo con mucho talento, pero no teníamos ese liderazgo veterano. Este año, McCann, Beltrán y Reddick llegaron y, aparte de sus habilidades en el béisbol, se vieron grandes en el clubhouse y nos enseñaron mucho del juego, cosas que no sabíamos. 
"Creo que ese liderazgo veterano nos ayudó y creo que ellos han jugado un gran papel en nuestro éxito". 
En particular, Beltrán, de 40 años y en su vigésima temporada en Grandes Ligas, ha impresionado en ese sentido-pese a una campaña por debajo con el madero.
"Beltrán ha sido ese veterano que se necesitaba en ese clubhouse", afirmó el manager de los Astros, A.J. Hinch. "Es un jugador altamente respetado, de un alto nivel y un alto intelecto. Los jugadores jóvenes y veteranos, además de los coaches, gravitan hacia él. 
"Su forma, su presencia y su calma han sido elementos cruciales en nuestro clubhouse. Cuando surgen cosas durante el año o cuando hay debates, la mayoría dirá, '¿Qué pensaría Carlos?' Esa clase de respeto te demuestra su lugar en nuestra jerarquía". 
BELTRÁN, EN BUSCA DEL ANHELADO ANILLO
Beltrán llega a la Serie de Campeonato de la Liga Americana contra los Yankees con línea ofensiva de .325/.433/.645 y 16 jonrones en un total de 58 partidos de postemporada. Sin embargo, el boricua aún no ha logrado ganar un anillo de campeón, siendo su única participación de la Serie Mundial en la edición del 2013 vistiendo el uniforme de los Cardenales. 
El 2017 podría representar la última oportunidad para el querido veterano. 
"Estamos pujando por él para que sea un campeón de la Serie Mundial", dijo Hinch. "Ahora bien, algo de eso es para él, pero la mayor parte es para nosotros. Queremos ser campeones".