Nueve aspectos del béisbol que extrañamos

Una de las mayores atracciones del béisbol es que los juegos son parte de nuestra vida cotidiana durante siete meses. Eso significa que los narradores de nuestros equipos favoritos son como nuestros familiares.

Ahora en lo que hubiera sido la primera mitad de la campaña, eso es aun más evidente. El inicio de la temporada de Grandes Ligas es algo especial, porque ha pasado tanto tiempo y en ocasiones le damos demasiada importancia a lo que sucede. Claro, sabemos que estamos exagerando, no lo podemos evitar.

Por eso, aquí presento la lista de los nueve aspectos que más extraño del béisbol:

1) J.D. Martinez vs. Aroldis Chapman

Todo lo que nos encanta de las Mayores se puede resumir en un momento de expectativa cuando todo está en juego y cada equipo presenta lo mejor que tiene para llevarse la victoria. Definitivamente, el toletero de los Patirrojos contra el lanzallamas cubano es un enfrentamiento que debemos observar de cerca, así no sean nuestros equipos favoritos.

2) Mike Trout le pega a una bola hacia uno de los canales

Los jardineros corren por la pelota o se están posicionando para ser el hombre del corte. Los infielders se están moviendo por todas partes. Es difícil seguir todo este movimiento. Como George Will dijo una vez, “Algunos dicen que el béisbol es lento. Pero en realidad, hay que fijarse en más de una persona. Todos se están moviendo -- y con un motivo”.

3) Celebraciones en las cuevas

La gente en ocasiones pregunta, “¿Esto lo planearon, cierto? Claro que sí”. Pero no nos podemos olvidar de lo más importante. Estos muchachos se llevan bien con sus compañeros, les encantan sus trabajos y están orgullosos del nivel al que han podido jugar. Como Joe Maddon dijo una vez, “Espero nunca llegar al punto en que no quiera celebrar. Si eso sucede, es hora de quedarse en casa. Por eso hacemos todo esto”.

4) Los saludos

Una de las mejores rutinas es un jugador entrando a la caja de bateo por primera vez en el partido. Saluda tanto al árbitro como al receptor con un toque en su equipo protector o con un gesto. Esto es maravilloso, una manera de decirle al mundo: “Éste es nuestro juego. Trataré de ganar, pero al final, estamos aquí porque tenemos el mismo amor y respeto por este juego”.

5) Los doble-plays

Es una impresionante coreografía, coordinación, anticipación y habilidad que se demuestra en sólo unos segundos. Durante un encuentro, vemos a Andrelton Simmons o a Ozzie Albies hacerlo rutinariamente. Sin embargo, hay varias partes que se mueven en sintonía.

6) Las curiosidades de los estadios

Cada uno tiene su esencia. No se trata sólo de los estadios más antiguos como el Fenway Park y el Wrigley Field, sino todos. No importa cuántas veces observas un diamante, siempre te impresiona la simetría y belleza. Algunos aficionados entran lo más pronto posible porque les encanta el ambiente de un estadio vacío, conscientes de que el lugar se transformará en las próximas horas. A varios empleados les encanta almorzar solos en un parque vacío. Como uno de ellos dijo, estos lugares tienen cierto poder.

7) Las prácticas de bateo

Los sonidos de los bates pegándole a las pelotas. Es algo diario que en ocasiones no valoramos tanto. Pero hay una cierta belleza en ver a los jugadores hacer fila para entrar a la jaula de bateo y practicar sus swings. También se trata de las reacciones de los peloteros cuando sus compañeros envían una bola hasta la parte más lejana del estadio.

8) Las pequeñas charlas

Ningún otro deporte presenta la oportunidad para hablar como el béisbol y las prácticas de bateo son la mejor oportunidad para hacerlo. Los jugadores pueden recordar los buenos momentos con los de otros equipos. Los comentaristas, coaches y managers hacen lo mismo.

9) Las reacciones de los fanáticos

El presidente de los D-backs, Derrick Hall, fue el primero en mencionármelo: Las miradas de alegría y expectativa en los niños buscando un autógrafo cerca del terreno. El directivo se lo también recuerda a sus jugadores y les pide que no se olviden de cuando tenían esa misma edad. “Para los jóvenes, esto es una gran parte de la experiencia en el estadio”, dijo el directivo. Sin importar las veces que seas testigo de eso, ésta es una de las mejores partes del día en el estadio.