Final amargo: eliminación prematura deja frustrados a Indios

10 de octubre de 2018

CLEVELAND -- Por tercer año consecutivo, el inconfundible aroma del champán flotaba en el pasillo afuera del vestuario de los visitantes, tras el último juego en el Progressive Field.
En el lado de Cleveland, el olor era desagradable.
Los Indios fueron construidos con un objetivo: ganar su primera Serie Mundial desde 1948. Pero luego de navegar tranquilos hacia un tercer título consecutivo de la División Central de la Liga Americana, no pudieron superar la primera ronda de los playoffs.
Octubre los rechazó de nuevo.
"Tuvimos un buen año", dijo el lanzador , cuya mudanza de la rotación de abridores al bullpen para la postemporada tal vez ilustre mejor la campaña insatisfactoria y desarticulada de Cleveland. "Definitivamente podríamos haber ido más lejos. Teníamos mucho talento aquí y no nos salió bien".
Nada salió bien para Cleveland. Pero más allá de ser barridos por los impresionantes Astros de Houston, que fueron superiores en todos los niveles, los Indios apenas dieron batalla.
Estuvieron muy cerca en 2016, cuando llevaron a los Cachorros de Chicago a extra innings en el séptimo juego de la Serie Mundial. Ahora han perdido seis juegos seguidos de playoffs desde que iniciaron con ventaja de 2-0 en la serie divisional del año pasado contra los Yanquis.
"Esta no es la manera en que lo esbozamos", señaló el relevista . "Son 25, 40 muchachos que tienen planes de ganar la Serie Mundial. Obviamente no nos salió bien".
Salvo por el campocorto estelar puertorriqueño , quien promedió .364 y disparó dos jonrones, la parte alta del orden al bate de Cleveland rayó en lo ridículo. , los dominicanos José Ramírez y Edwin Encarnación, así como Josh Donaldson, batearon para un combinado de .095 (4 de 42) con dos producidas, ningún extrabase y 12 ponches.
Es el segundo fracaso de postemporada para Ramírez, quien fue candidato a Jugador Más Valioso hasta que despareció. Ahora está de 31-2 en dos apariciones en los playoffs, una tendencia alarmante que tendrá que esperar al menos un año para revertir.
Tras la derrota del lunes, Ramírez tuvo que ser alentado para hablar con los reporteros por su compatriota Encarnación antes de entregar respuestas tan insatisfactorias como sus swings.
"No me desempeñé como quería", reconoció. "Pero son cosas que suceden en el béisbol".
El pitcheo de Cleveland no fue mucho mejor. El as tuvo su segunda postemporada desconcertante luego que el ganador de 20 juegos no lució como sí mismo en el primer partido. El bullpen, una desgracia durante meses, colapsó por completo en el tercer juego después que dos lanzamientos erróneos de Bauer en la séptima entrada le abrieron las puertas a los Astros para una paliza de 11-3.
Hay varias razones del porqué los Indios no avanzaron, pero la insuficiencia del equipo para resolver los problemas del bullpen, los cuales comenzaron cuando y Joe Smith no renovaron sus convenios en el invierno pasado, están el inicio de la lista.
Debido a que no se podía contar con Miller, y compañía, el manager Terry Francona movió a un rol como relevista a Bauer, presumiblemente el mejor abridor del equipo y quien estaba en camino a un posible Cy Young cuando un batazo le rompió la pierna en agosto.
La decisión fracasó, y aunque es fácil juzgar a Francona tras la prematura eliminación de los Indios, Bauer no estuvo cómodo con su papel.
"Desafortunadamente fui golpeado por el batazo, algo que rompió el ritmo para mí personalmente", dijo Bauer. "Hubo mucha amargura sobre eso. Y como equipo, creo que tenemos un buen grupo de jugadores principales aquí, así que hay mucha esperanza para el futuro".