Con nombres como Guerrero, Bichette y Biggo causando un impacto a nivel de liga menor, el 2018 ha sido un buen año para nostalgia de béisbol de la década de los 90. El lunes, los Gigantes subieron al lanzador Dereck Rodríguez, lo cual marcó el primer ascenso de Grandes Ligas de esta segunda generación de peloteros.
Definitivamente, existe un parecido con su padre, el Salón de la Fama boricua Iván Rodríguez:

Rodríguez fue seleccionado en la sexta ronda del draft como jardinero. Después de tener problemas al bate, fue convertido en lanzador en el 2014. Claramente, esa decisión ha rendido dividendos: In 50 1/3 entradas en nueve aperturas en Triple-A este año, Rodríguez tiene efectividad de 3.40 con 53 ponches. 
Uno puede imaginarse de dónde viene el fuerte brazo del joven Rodríguez. Su papá retiró al 46% de los corredores en intentos de robo en una Carrera de 21 años en Grandes Ligas. 
Dereck aún no lanza una sola entrada en las Mayores, pero ya ha asistido a un Juego de Estrellas. Aquí está, acompañando a su papá en el Clásico de Media Temporada del 2000 en Atlanta:

¡Bienvenido a Grandes Ligas, Dereck!