SEATTLE – Para Julio Rodríguez, esta etapa inicial de la temporada requiere de un balance.

Sí, quedó frustrado al ser sorprendido para terminar el juego del domingo – luego de salir como corredor emergente. Incluso después de un largo período tras la finalización de ese encuentro, el dominicano decidió no hablar con la prensa.

Sí, Rodríguez mira sus números y sabe que está en medio de un comienzo lento, por tercer año consecutivo. Y sí, también se espera que sea él quien responda en las situaciones de mayor apremio de su equipo.

Pero también sabe que no puede dejar que esto se lo coma vivo.

“Siento que la gente se deja llevar por lo que está pasando ahora y se enfoca en lo actual, cuando se trata más del desarrollo del plano general”, expresó Rodríguez el lunes, antes de conectar tres hits en nueve turnos en los primeros dos partidos de Seattle contra Cincinnati, además de realizar una gran jugada defensiva el martes. “Nunca me afinco tan temprano en el año. Siempre estás buscando ser bueno con todo, pero si las cosas no salen bien, tienes mucho tiempo por delante para corregir distintas situaciones, continuando con el trabajo duro”.

Los detractores del adagio “es temprano”, que sobrestiman la urgencia de abril – y con cierta razón, pues los Marineros se quedaron fuera de los playoffs el año pasado por un solo juego – no van a criticar mucho al quisqueyano, quien en ocasiones es su jugador más productivo.

“Muchas veces, olvidamos que hacemos lo más difícil que hay en los deportes”, señaló Rodríguez refiriéndose al acto de batear. “Siento que no podemos criticarnos tanto, especialmente siendo tan temprano. Siempre tienes que tratar de hacer lo mejor que puedas. Pero si sales con tu mejor swing y te hacen un buen pitcheo, no queda más que quitarte el sombrero”.

Rodríguez ha sido el centro de grandes jugadas – el hit de oro ante Boston el 31 de marzo y otro imparable con las bases llenas ante los Cachorros el viernes pasado, momentos que produjeron dos victorias – pero esas instancias han sido opacadas por las inconsistencias, que además han exacerbado los problemas colectivos de los Marineros.

Aun con lo hecho entre lunes y martes, Rodríguez batea .206 con OPS de .481 y una tasa de ponches del 34.3%. Sus Victorias por Encima del Reemplazo está en negativo (-0.2, según Baseball-Reference). Sigue en busca de su primer jonrón del año.

Todos estos factores explican por qué el manager de Seattle, Scott Servais, le dio al oriundo de Loma de Cabrera su primer día libre de la temporada el domingo, en un esfuerzo por “desconectar” al cañonero, antes de que éste saliera como corredor emergente.

“Mira, nunca sabes cuándo es el mejor día para desconectarte del béisbol”, explicó Rodríguez. “Es así”.

Rodríguez sigue firme con su enfoque, con la confianza de un inminente despertar pronto, apuntando a unas pelotas bien conectadas en Toronto. La semana pasada, cada una de sus seis conexiones de fuerza fueron outs, incluyendo una línea que salió de su bate a 114.5 millas por hora hacia Kevin Kiermaier – el batazo más fuerte para cualquier bateador de los Marineros este año.

“Ahora mismo, estoy dejando que fluya el juego”, continuó Rodríguez “Siento que en las últimas series, le he estado dando bien y de frente, siendo retirado”.

En cuanto al factor de “ser retirado”, su tasa de 32.6% de swings fallidos, que se ubica en el 16to percentil según Statcast, ciertamente puede mejorar. Incluso con algunos ajustes en su mecánica – intentar menos movimientos en su parte media, en su posición para batear – hay asuntos por corregir. Algunos sugieren que esto lo hace susceptible a los lanzadores que cambian agresivamente de velocidad durante los turnos. Más allá de los swings, es posible que exista una correlación en la caída de batazos por el aire, de 24.5% el año pasado a 16.3% ahora.

“Cuando Julio batea por el aire, suelen ocurrir cosas buenas”, expresó Servais. “Significa que está a tiempo a la hora de sacar el bate. Cuando le da por el suelo o falla con sus swings con los pitcheos rompientes, es porque está tarde”.

Los Marineros, de muchas maneras, van como vaya Rodríguez. No es una coincidencia que el club impusiera un récord de triunfos para un mes con 21 en agosto pasado, cuando el dominicano fue el Jugador del Mes de la Liga Americana. Pero al final, no necesitan que juegue a un nivel histórico, sino que lo haga de una manera más consistente.

“No lo hemos visto llegar [al nivel] que puede alcanzar”, indicó Servais. “Y cuando eso pasa, somos un equipo diferente. Es temprano y no ha ocurrido aún”.