Julio Rodríguez exhibió un enorme aplomo tras mal inicio en SEA

6 de diciembre de 2022

SAN DIEGO – tuvo una primera temporada de ensueño en Grandes Ligas con los Marineros, con premios, un nuevo mega-contrato y una participación en la postemporada.

Sin embargo, muchos se olvidarán de que el jardinero dominicano no tuvo un buen inicio de su carrera en las Mayores, ya que llegó al 23 de abril con apenas ocho hits en sus primeros 45 turnos al bate (.167/.231/.208) y 23 ponches. Los Marineros no entraron en pánico. Rodríguez tampoco entró en pánico. Y de ahí en adelante, el ahora Novato del Año de la Liga Americana bateó .296/.356/.540 (OPS de .896) con 28 jonrones.

“Lo dije durante todo el año y lo digo diciendo: Crédito para él”, expresó el manager de los Marineros, Scott Servais, al reflexionar sobre el 2022 de Rodríguez. “La razón por la que tuvo la temporada que tuvo y ganó el premio a Novato del Año fue porque no hubo pánico con él, ni con nuestros coaches. Muchos jugadores jóvenes entran en pánico a esa altura.

“No estaba teniendo mucha suerte, (pero) luego empezaron a cambiar las cosas. Y cuando pasó eso, él despegó”.

Efectivamente, Rodríguez terminó la campaña regular con .284/.345/.509, OPS de .853 y OPS+ de 147 (47 puntos por encima del promedio). Una participación en el Juego de Estrellas, ser subcampeón del Festival de Jonrones y firmar un nuevo contrato de 12 años y US$209.3 millones fueron parte de su 2022, logros seguidos por su premio a Novato del Año, un Bate de Plata y ahora un puesto en el Segundo Equipo Todo MLB. De paso, Rodríguez fue clave a la hora de ayudar a Seattle a clasificar para los playoffs por primera vez en 21 años.

Y todo fue a los 21 años de edad.

“Eso dice mucho”, manifestó Servais. “Muchas veces hablas de los jugadores jóvenes y cómo van a manejar la adversidad. Él viene de una muy buena familia. Él entiende las cosas. Pero mucho crédito también para nuestros coaches, nuestra gerencia… nadie entró en pánico. Sabemos que él es bastante bueno. Si nosotros no entrábamos en pánico, él no iba a entrar en pánico, y no lo hizo”.

Ahora, Rodríguez es parte de un equipo de los Marineros que viene de ganar 90 juegos y agregó este invierno al también guardabosque dominicano Teóscar Hernández vía un canje con los Azulejos y al segunda base Kolten Wong en un cambio con los Cerveceros, además de firmar a una extensión de contrato al diestro quisqueyano Luis Castillo.

Entre todo el talento en Seattle, Rodríguez es la piedra angular del roster, la pieza alrededor de la cual se ha construido un conjunto que aspira a lo más alto de ahora en adelante.

“En cuanto al mismo jugador, no podrías pedir un mejor paquete”, dijo Servais. “Pero lo que lo separa es su personalidad. Es la sonrisa en su cara. Es lo que hace que los fans graviten hacia él y él no le teme a eso.

“A algunos jugadores no les gusta que las luces estén sobre ellos. A él sí le gusta. Y mientras más brillantes, más contento se pone”.