Castrovince: Peloteros latinos que podrían convertirse en súper estrellas

6 de febrero de 2017

Existen varios peloteros latinos en Grandes Ligas cuyo talento y potencial sugieren que podrían convertirse en súper estrellas en 2017. 
Cabe mencionar que hasta ahora ninguno de los peloteros hispanos listados a continuación ha visto acción en un Juego de Estrellas, pero todos ellos tienen el potencial para aspirar a ganarse el trofeo de Jugador Más Valioso o el Cy Young en 2017.
, Indios
Después de aparecer en la lista de los 15 finalistas a ganar el trofeo Cy Young de la Liga Americana en 2015, Carrasco parecía tener mayores posibilidades de llevarse ese honor en 2016. Pero a principios de la temporada, el venezolano sufrió una lesión en la corva, y a finales del año, sufrió una fractura en una mano producto de un batazo, lesión que afectó su participación en la postemporada de los Indios. 
A pesar de las lesiones, Carrasco registró un promedio de efectividad de 3.32 y un ERA+ de 141 en 25 aperturas, y su promedio ERA+ en los últimos tres años es de 134 con 9.8 ponches por cada nueve entradas y un WHIP (bases por bolas más hits entre entradas lanzadas) de 1.07. Cerca de cumplir 30 años de edad, el diestro nunca ha sido convocado a un Juego de Estrellas, pero su talento es innegable.
, Astros
Bueno, admito que con esta selección podría estar haciendo trampa, porque Correa ganó el trofeo como Novato del Año de la Liga Americana en 2015 y probablemente a puede ser catalogado como una estrella, sino es que una súper estrella. Pero debido a su "mal año" (en sus propias palabras) en 2016, el puertorriqueño no asistió a su primer Juego de Estrellas y por lo tanto califica para esta categoría.
¿Qué tan malo fue el 2016 para Correa? Sinceramente, nada malo. En su temporada con 21 años de edad, Correa tuvo un OPS+ de 123 (23% mejor que el promedio en la liga). En la historia de Grandes Ligas, sólo otros tres shortstops de 21 años o menos registraron un OPS+ al menos así de alto: Rogers Hornsby (169 en 1917), Arky Vaughan (146 en 1933) y Alex Rodríguez (161 en 1996). Si Correa lograra tener una campaña con calibre de JMV en un mejorado lineup de los Astros en 2017, no sorprendería absolutamente a nadie.
Julio César Urías, Dodgers
El mexicano probablemente no es un serio candidato al trofeo Cy Young de la L.N., simplemente porque los Dodgers serán bien cuidadosos con su carga de trabajo en su segunda temporada en las Mayores. Pero en sus últimas 13 aperturas de su campaña de novato en 2016, el zurdo de Culiacán tuvo una efectividad de 2.73 y 77 ponches en 69 1/3 innings.
Durante ese trecho, Urías cumplió los 20 años de edad. Es absurdo lo joven que este muchacho es y lo bueno que puede ser sobre la loma. 
Gary Sánchez, Yankees
Sánchez se convirtió en el primer jugador en la historia desde Wally Berger (1930) en conectar 20 jonrones en sus primeros 51 juegos de Grandes Ligas, y ese podría ser un hito de doble-filo para un joven pelotero que juega en uno de los mercados más mediáticos del béisbol. La presión sobre Sánchez para convertirse en la nueva "cara de la franquicia" en su primera temporada completa será inmensa y básicamente injusta. El dominicano tendrá 24 años de edad y probablemente será tercer bate por los Bombarderos del Bronx en 2017.
Pero después de esa exhibición de poder y su excepcional trabajo detrás del plato (Sánchez puso fuera al 40.6% de los corredores tratando de estafarse una base), ¿cómo podríamos dejar a este chico fuera de la lista?
Javier Báez, Cachorros
Desconocemos con exactitud la manera en que el manager Joe Maddon va a utilizar a este versátil jugador en 2017, pero el puertorriqueño arrancó cada partido de la postemporada de los Cachorros en la segunda base, y su defensa lució casi siempre impecable.
Definitivamente, Báez necesitará mostrar más con el madero si desea convertirse en una súper estrella. Su desempeño en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, cuando se fue de 22-7 con cuatro dobles para ser nombrado co-JMV con el zurdo , fue una muestra de lo que el boricua de 24 años de edad es capaz de hacer, pero su actuación en la Serie Mundial, cuando se ponchó en 13 ocasiones en 30 turnos al bate, también fue una muestra de sus limitaciones. Pero el espacio para mejor de este chico es real.