PANAMA --Lourdes Gurriel hijo, quien junto a su hermano Yulieski, desertó de Cuba para jugar en las Grandes Ligas, exhibió el miércoles en Panamá un poco de lo que puede hacer con el madero y su guante.
El pelotero cubano, de 22 años, realizó una sesión de bateo y fildeo ante cazatalentos de los equipos de las mayores, en un paso importante en su aspiración de alcanzar una jugosa firma, como ya lo logró su hermano mayor Yulieski con los Astros de Houston.
Gurriel disparó varios jonrones y dominó algunos rodados en el campo interior durante la exhibición, realizada en el estadio Rod Carew.
"Es un sueño hecho realidad. Es el primer paso para llegar a Grandes Ligas", señaló Gurriel, quien ha estado preparándose en Miami y Panamá.
Gurriel estuvo acompañado por el retirado pelotero panameño Carlos Lee, quien jugó con media docena de equipos en las mayores, entre ellos los Astros.
La exhibición se realizó después de que el cubano fue declarado agente libre, lo que lo hace elegible para firmar con cualquier equipo de las mayores.
Gurriel, un versátil jugador de cuadro que bateó para 277, con 27 cuadrangulares y 161 producidas en seis temporadas en el béisbol de su país, lució bastante bien pese a que al inicio se mostró algo nervioso.
"Este muchacho es un tremendo prospecto", dijo Lee. "Al principio se vio como apresurado, pero tiene mucho potencial y futuro".
"Le dije que no se apurara, que confiara en él", agregó. "Los resultados fueron mejores".
Los hermanos Gurriel abandonaron el hotel de su equipo cubano durante el desarrollo de la Serie del Caribe en República Dominicana en febrero. Yulieski, de 32, integró la selección nacional de su país en varios torneos internacionales --como el Clásico Mundial de béisbol-- y era una de las joyas codiciadas por los clubes de las mayores.
El infielder firmó en julio con los Astros por cinco años y 47.5 millones de dólares, y debutó en Grandes Ligas el mes pasado.
"Yo también puedo", dijo Lourdes Gurriel. "Es una meta que me he trazado".