Noah Syndergaard, pieza crucial en las aspiraciones de los Mets para el 2018

22 de diciembre de 2017
Frank Franklin II/AP

NUEVA YORK - A medida que fue avanzando el verano y los Mets se fueron hundiendo más y más en el Este de la Liga Nacional, llegó a cuestionarse la decisión del equipo de permitir que el as - quien llevaba fuera de acción desde abril por un desgarre en un músculo lateral - regresara a la lomita. Syndergaard no podía hacer nada para ayudar a la novena de Queens en la recta final. Por lo tanto, ¿por qué no darle todo el descanso posible?
Del otro lado de ese argumento, Syndergaard no veía la hora de agarrar una bola, subirse al montículo e intimidar a los bateadores contrarios - aunque fuese brevemente. Entonces, una vez que los médicos le dieron el visto bueno para lanzar, Syndergaard abrió dos juegos, en los que trabajó un total de tres innings en blanco con una recta que alcanzó las 101 millas por hora.
Syndergaard no está de acuerdo con aquellas personas que no creen que haya valido la pena el riesgo.
"Siento una enorme confianza por la manera en que terminé la temporada", dijo el lanzallamas. "No creo haberme sentido nunca como me sentí en esa última apertura ante los Filis. Mis pitcheos, mi repertorio, hasta en cuestión de velocidad y poder. Me sentí muy bien al final de la temporada y voy a seguir con hambre y tratando de mejorar cada día".
Hay motivos para dudar que Matt Harvey, y Zack Wheeler, quienes se perdieron gran parte de la temporada del 2017 por lesiones, puedan mantenerse saludables de ahora en adelante. Los Mets no han sumado a Syndergaard a esa categoría, ya que su lesión fue muscular y no en un hombro, codo ni arteria.
De hecho, los Mets esperan que Syndergaard empiece el 2018 de la misma manera en que comenzó la temporada pasada: En salud, como candidato para el Premio Cy Young y con la capacidad de ser el mejor lanzador de Grandes Ligas.
Para conseguirlo, Syndergaard ha modificado su rutina invernal. Viene trabajando con los preparadores físicos Eric Cressey - a quien Syndergaard conoce desde que era prospecto en la finca de Toronto - y Shane Rye para incorporar más flexibilidad y velocidad a su régimen de costumbre. La idea es hacer más que levantar pesas.
"Sigo levantando pesas, pero de una manera más inteligente", dijo Syndergaard. "El año pasado, no fue lo más sensato en cuanto a los ejercicios que elegí. Es distinto. Siguen siendo entrenamientos exigentes, pero mi cuerpo nunca se ha sentido mejor".
Los Mets esperan que Syndergaard vuelva a ser, junto con , uno de los pilares de su rotación, la clase de lanzador que hasta el gerente general Sandy Alderson ha reconocido como indispensable para el éxito del equipo.
La última vez que Syndergaard estuvo en salud durante una temporada completa, en el 2016, tuvo foja de 14-9 con efectividad de 2.60 y promedió casi 11 ponches por cada nueve entradas. Su objetivo, con un entrenamiento más inteligente, es ser mejor en el 2018.
"En verdad no me fijo metas", dijo Syndergaard. "Sí, sería bueno lanzar 200 innings, pero hay muchas cosas fuera de tu control para llegar a 200 innings, así que trato de no ponerme demasiada presión. Simplemente quiero lanzar cada cinco días y dejarlo todo en el terreno".