Desde que se inauguró el Oriole Park en el Camden Yards en 1992, el B&O Warehouse en la Calle Eutaw, detrás del muro del jardín derecho, ha tentado a los bateadores zurdos de poder. Pero 26 años después y pese a que en el Este de la Liga Americana no han escaseado los cañoneros zurdos - Chris Davis, el dominicano David Ortiz, Jason Giambi y el puertorriqueño Carlos Delgado, entre muchos otros - nadie ha conectado jonrón contra el almacen en un juego de temporada regular.
Pero hay un Salón de la Fama que sí logró la hazaña: Ken Griffey Jr., en el Festival de Jonrones de 1993.
El Festival de Jonrones de 1993 fue el tercero de los ocho en los que participó Griffey durante su carrera. El guardabosque sigue siendo el único jugador que ha ganado el certamen tres veces. Aunque el boricua Juan "Igor" González ganó el Festival en aquel 1993, fue Griffey quien se robó el show al conectar un bambinazo de 465 pies que llegó hasta el almacen:
Antes del evento, Griffey había dicho que necesitaría pararse en la segunda base y usar un bate fungo para alcanzar ese edificio.
El batazo llamó la atención de otro ícono deportivo de los años 90, quien ganó el Festival de Jonrones de Celebridades el año anterior, antes de jugar béisbol profesional. "Es como si yo hubiese encestado un tiro de tres puntos en el momento preciso", dijo Michael Jordan.
Como lo hacen para todos los bambinazos que llegan a la Calle Eutaw, los Orioles luego colocaron una placa en el sitio preciso donde el batazo de Griffey hizo contacto con el almacen:

Tratar de igualar la hazaña de Griffey ha resultado ser un reto bien difícil.
Los Orioles quizás hicieron su mejor intento cuando Jay Gibbons sonó un jonrón de 420 pies contra Brett Myers de los Filis por la línea del bosque derecho el 28 de junio del 2003:
Lance Berkman casi lo logra por los Astros el 18 de junio del 2008, pero su cuadrangular de 430 pies contra Jeremy Guthrie se quedó corto:
Cuando Griffey dio su batazo contra el edificio, le restó importancia, señalando que había sucedido durante el Festival de Jonrones. "Simplemente significa que se escribirá sobre esto durante un tiempo", dijo el toletero. "Cuando alguien lo haga en un juego, lo mío pasará al olvido".
Pero estamos en el 2018, nadie lo ha logrado y seguimos marvillados con aquel cañonazo de Griffey. Obviamente, hizo algo bien especial.