Los Filis pueden estar contentos con lo ocurrido el pasado fin de semana en Pittsburgh. No solo se conquistó la serie, gracias a un sensacional batazo de Rhys Hoskins, en la parte alta de novena, sino que también el equipo continúa manteniendo el pulso por entrar en la postemporada, vía comodín de la Nacional.

Pero las buenas noticias no se quedan ahí. Durante la serie ante los Piratas, los fanáticos de los Filis conocían la noticia de que el equipo había logrado firmar al lanzador zurdo Drew Smyly, y para crearle un espacio en el roster, el relevista mexicano Fernando Salas fue designado para asignación.

Smyly, de 30 años de edad, tenía una marca de 1-5 y efectividad de 8.42 en 13 presentaciones (nueve aperturas) esta campaña por Texas.

Fue dejado en libertad el 25 de junio y firmó un contrato de ligas menores con los Cerveceros el 1ro de julio. Tuvo 4.97 de EFE en tres aperturas en Triple-A, en las que acumuló 18 ponches y cedió tres bases por bolas en 12.2 innings. Smyly se salió de su contrato con los Cerveceros el jueves cuando el club decidió no añadirlo al roster de 25 jugadores.

Hasta ahí todo normal, ante la situación de mejora que necesita la lomita de los Filis, para afrontar lo que resta de temporada regular y los retos que tiene enfrente, que no son otros que lograr entrar en la postemporada, después de muchas temporadas de ausencia.

Pero los fanáticos de los Filis pueden sonreír después de ver cómo Smyly logró completar una sensacional actuación en el juego del domingo y cómo su actuación desde el montículo fue vital para el triunfo final de los Filis ante los Piratas, en el juego y en la serie.

Debutó con triunfo, aunque no se llevó la victoria en el duelo, ya que el batazo que sentenció el juego por 2-1, llegó en entradas extra, pero desempeñó una gran labor, digna de lo que se espera de los lanzadores de apertura de los Filis.

Smyly llegaba con los números mencionados anteriormente, pero con la P de los Filis en su gorra, consumió seis entradas de calidad, permitiendo tan solo cuatro imparables, con una carrera, dos bases por bolas y 8 strikeouts, para bajar su ERA a un promedio de 7.69.

Sin su labor, los bates silenciados de los Filis en el tercer juego de la serie, no habrían podido llegar con opciones de triunfo a la recta final del duelo ante los Piratas y se habría complicado un poco más la lucha por entrar en puestos de comodín.

Pero con esa intervención, Smyly ha logrado infundir un poco más de optimismo a los seguidores de Filadelfia, que ven en su refuerzo, un motivo más para creer en las opciones de este equipo.

Bienvenido Drew… la lucha sigue.

Hasta pronto desde España.