Uno de los mejores aspectos de la Serie Mundial de Pequeñas Ligas son los actos de deportividad, que sirven para recordarles a todos la forma más pura del béisbol.
En el juego del martes por el campeonato de la región suroeste, hubo una situación conmovedora entre dos rivales, luego de un momento de preocupación en la parte baja de la primera entrada.
Luego de golpear a Isaiah Jarvis de Oklahoma con un bolazo en el casco, el lanzador de Texas, Kaiden Shelton, se vio visiblemente afectado. Jarvis, quien quedó tirado en el terreno momentáneamente, se paró y arrancó su rumbo a la inicial. Antes de llegar a la base, se dirigió hacia la lomita, en donde abrazó a Shelton.
“Oye, vas bien”, parece haber dicho a Jarvis.