¿Clave del éxito de Padres? Un bullpen intraficable, con mucho sabor latino

10 de abril de 2025

Morejón. Estrada. Adam. Suárez. Fin del juego.

Esa fórmula ha funcionado mucho esta temporada para los Padres – y nunca mejor que en la gira que concluyeron el miércoles. Sus tres victorias contra los Cachorros y los Atléticos fueron triunfos por una carrera. En las tres, usaron ese cuarteto (en ese orden) para asegurarlas.

Ahora, los Padres regresan a San Diego con el mejor récord de las Grandes Ligas. No es coincidencia que su efectividad colectiva de 1.65 del bullpen sea también la mejor en las Mayores en lo que va de campaña.

“Algunas personas tratan este deporte como un trabajo”, dijo , quien se ha adueñado del rol del séptimo episodio. “Pero en este bullpen, simplemente se siente como volver a los viejos tiempos cuando tú y tus amigos están ahí jugando béisbol en el mismo equipo y todos quieren lo mejor para el otro”.

“Es una familia. Todos somos hermanos. Esa relación construye lo que estamos haciendo”.

Lo que están haciendo ha sido fundamental para el arranque de 10-3 de los Padres. El relevo ha se ha visto excelente en general. Pero el cuarteto conformado por el cubano , Estrada, y el venezolano Robert Suárez ha estado intraficable en los finales de los partidos. Esos cuatro han trabajado 28.0 innings, permitiendo apenas dos carreras y nueve hits.

“Juegas para asegurarte de que podamos llegar a esos muchachos”, dijo el manager de los Padres, Mike Shildt.

Lo contrario también es cierto. El domingo, los Padres remontaron un déficit de cuatro carreras para una victoria contundente de inicio de temporada en el Wrigley Field. El manager de los Cachorros, Craig Counsell, habló más adelante de perder la oportunidad de mantener esa ventaja, para que su equipo pudiera evitar la parte final de ese bullpen de los Padres.

El dirigente de los Atléticos, Mark Kotsay, tuvo más o menos la misma opinión el miércoles. Los Padres tomaron ventaja de una carrera en la quinta entrada. Luego, usaron a esos cuatro lanzadores para un episodio en blanco cada uno y asegurar una victoria por 2-1.

“A veces, tienes que darle crédito a un cuerpo de lanzadores”, expresó Kotsay. “Ese bullpen allí es uno de los mejores de la liga”.

El miércoles fue quizás un caso único. Los Padres fueron apaleados el martes y tienen día libre el jueves. Eso significaba un bullpen más fresco y descansado – y el potencial para que Shildt dirigiera agresivamente. Hizo exactamente eso, sacando al abridor dominicano Randy Vásquez después de sólo 61 lanzamientos y usando al zurdo Morejón para enfrentar a dos temibles toleteros zurdos que venían a batear en esa entrada.

“Sí, puede acortar el juego para el manager”, indicó Adam. “Pero obviamente, ése es su labor. Nuestro trabajo es responder al llamado, intentar colgar un cero cuando nos llamen”.

Han hecho mucho de eso. Los números de relevo de los Padres son suficientemente llamativos. Pero con contexto, son aun mejores. Las carreras que han permitido esta temporada generalmente han sido intrascendentes.

Consideren esto: Ningún relevista de los Padres ha entrado a un partido que los Padres estuvieran ganando y luego haya perdido esa ventaja.

“Nuestro trabajo siempre es colgar ceros allí”, dijo Estrada. “Por supuesto, todos nos respaldamos mutuamente. Simplemente estamos haciendo nuestro trabajo”.

El dominio se extiende más allá de los cuatro del final. El quisqueyano Wandy Peralta y Yuki Matsui se han destacado a principios de esta campaña, permitiendo una sola carrera entre ambos. Su surgir ha sido crucial, después de que los Padres perdieran a Tanner Scott del bullpen del año pasado.

Los Padres entraron a la campaña aparentemente cortos de zurdos para situaciones de apremio. Pero Morejón ha asumido desde entonces ese rol, con Peralta y Matsui detrás de él. Mientras tanto, Alek Jacob, el mexicano Omar Cruz y Logan Gillaspie han asumido parte del trabajo de menor presión – al punto de que Shildt a menudo les ha dado crédito por victorias de los Padres uno o dos días después del hecho, debido a los innings que ayudaron a cubrir.

Ha sido un esfuerzo colectivo – con un Suárez totalmente dominante al final. Con su entrada impecable del miércoles, el venezolano se convirtió en el primer monticular en la historia de la franquicia en comenzar una temporada con seis presentaciones consecutivas sin permitir hits.

“Es un grupo tan bueno”, comentó Adam. “Es simplemente un grupo divertido y muy unido. Somos simplemente personas que, sin importar cuál sea la situación, cuando llega la llamada, todos queremos salir y hacer nuestro trabajo”.

Y hasta ahora, lo han hecho mejor que cualquier otro bullpen en MLB.