Mejía con una auténtica oportunidad ahora en S.D.

19 de junio de 2019

SAN DIEGO – Describir el estilo de bateo del dominicano Francisco Mejía como “agresivo” es quedarse corto. Su índice de swings de por vida del 58% es uno de los más altos de Grandes Ligas.

En cierto sentido, los Padres no tienen inconveniente con dicha agresividad. Sí, Mejía ha tenido dificultades en su breve estancia en Grandes Ligas. Pero es un receptor de apenas 23 años, por lo que se espera que haya algunos contratiempos en su desarrollo.

Eso no significa que los instructores de la novena de San Diego no vayan a trabajar con Mejía para mejorar su disciplina al bate. Lo que no harán es pedirle que cambie su identidad como bateador.

“Tiene la habilidad para darle a casi cualquier pitcheo tirado en cualquier momento”, dijo el manager de los Padres, Andy Green. “Con Franky, hemos llegado al punto de que queremos que sea él mismo. Que haga swing con el bate, que sea agresivo, que encuentre el pitcheo al que le quiere dar y le haga un buen swing.

“Vamos a seguir con la idea de que un muchacho que ha bateado toda la vida va a rendir aquí”.

Tratándose de un cátcher, el bate de Mejía se ha considerado élite en ligas menores. El quisqueyano se dio a conocer con una racha de 50 juegos consecutivos conectando de hit por Clase-A Avanzada hace tres años. Esta temporada, lleva promedio de .365 con porcentaje de embasarse de .411 y slugging de .746 por Triple-A El Paso.

Mejía fue convocado al equipo grande el lunes y conectó un jonrón de dos carreras en el triunfo de San Diego por 4-1 sobre los Cerveceros de Milwaukee en el Petco Park.

Mejía no disputaba un partido por los Padres desde mediados de mayo, cuando ingresó a la lista de lesionados por un esguince en la rodilla izquierda. Cuando se recuperó a principios de junio, fue enviado a Triple-A.

Ahora, Mejía tiene una verdadera oportunidad de abrirse paso en el equipo grande. El receptor titular Austin Hedges es todo un mago a la defensa, pero en cuanto a la ofensiva se refiere, ha dejado mucho que desear esta temporada. Llegó al miércoles con promedio de .185 y OPS de .567.

Dados los atributos defensivos de Hedges, Mejía probablemente se tenga que conformar con dividir el tiempo de juego en la receptoría. Pero si rinde al bate, eso es justo lo que conseguirá.

“El desempeño dictará las cosas, pero va a tener oportunidades”, dijo Green. “Franky no se apoderó de nada la última vez. Tendrá la oportunidad de ganar tiempo de juego”.