¿Cómo logran los Rays sobreponerse a los tantos obstáculos?

28 de junio de 2025

Los Rays está disputando sus partidos como locales esta temporada en el estadio George M. Steinbrenner Field, la sede primaveral de los Yankees — el equipo al que le están pisando los talones en la División Este de la Liga Americana. Y como es una instalación de pretemporada, dicho estadio tiene capacidad para apenas 10,046 espectadores. Casa pequeña este año, pero una historia bien grande.

Además, su calendario de juegos también complica sus opciones de seguir en estas alturas en la segunda mitad de la temporada: Para evitar las altas temperaturas veraniegas de Tampa, MLB programó muchos partidos al principio de la campaña en el en Steinbrenner Field. Eso significa que los Rays disputarán 50 de sus últimos 81 partidos de la temporada como visitantes.

Aun así, ¿sabes qué hace el equipo de Kevin Cash? No se rinde jamás. Pero eso no es sorpresa: Los Rays siempre parecen mantener ese espíritu, sin importar dónde jueguen ni en qué año.

Actualmente, hay mejores récords en el béisbol. Pero no hay un equipo más difícil de vencer que los Rays, que llegaron al sábado a juego y medio de los Yankees, cuyo presupuesto es US$200 millones mayor que el de los Rays, que ocupan el puesto 28 en la liga en cuanto a nóminas se refieren. No parece importarles, ni afectarles mucho. Empezaron la temporada con récord de 21-26 y desde entonces han tenido marca de 25-10.

Mira lo que los Rays están haciendo una vez más desde otra perspectiva, sólo por la manera en que el equipo que está por delante de ellos en el Este de la Liga Americana — los Yankees — gasta enormes sumas de dinero cada año en jugadores. Desde el 2008, cuando los Rays llegaron por primera vez a la Serie Mundial (antes de perder contra los Filis), han estado en el Clásico de Otoño tantas veces como los Yankees.

Antes de barrer en tres juegos a los Reales, los Rays ganaron dos de tres compromisos contra los Tigres, que comenzaron la serie con el mejor récord de las Mayores. Cuando terminó, le pregunté al manager de Detroit, A.J. Hinch, qué sigue haciendo de los Rays un hueso tan difícil de roer.

“Siempre parecen ser subestimados, pero no deberían serlo”, dijo. “Es muy difícil ponerse a la par de ellos. Están diseñados para tener una respuesta a cada movimiento. Hacen todo bien y Kevin hace un gran trabajo aprovechando las fortalezas de sus jugadores. Tienes que jugar muy bien para vencerlos, porque ellos no se vencen a sí mismos”.

Hinch, cuyos Tigres también juegan según sus fortalezas y no se vencen a sí mismos, está hablando, por supuesto, de la versión del 2025 de los Rays. Pero bien podría estar hablando de cualquier edición de los Rays de las últimas campañas. Siempre se les subestima, incluso cuando no se debería. No se derrotan solos. Lo que hacen, año tras año —incluso cuando juegan frente a pequeñas multitudes en el Tropicana de St. Petersburg y aunque todo el mundo les gane en presupuesto— es lanzar bien, jugar un béisbol fundamental sólido y competir hasta el último momento para ganar el partido.

Una vez más: Nadie tendrá que superar más obstáculos para llegar a octubre esta vez, y los Rays simplemente siguen encontrando la manera de resolverlo todo, con este grupo de luchadores y ganadores. El dominicano lidera el equipo con 20 jonrones y 51 carreras impulsadas. Se voló la cerca el jueves por la tarde contra los Reales. También lo hizo , un veterano de los Rays que está teniendo otra gran campaña, con 17 bambinazos, 47 impulsadas y un promedio de bateo de .273. El mexicano , quien batea .331 como el primera base de Cash, y el cubano siguen en el orden ofensivo.

Shane Baz lanzó ocho entradas en blanco contra los Reales el jueves, permitiendo apenas tres hits y ponchando a nueve. Fue su apertura número 16 de la temporada. Eso significa que no sólo ha sido parte de una rotación sólida para Cash, sino de una bastante notable, ya que sus otros cuatro abridores —, , y — también han hecho 16 aperturas. En un momento en el que tantos abridores en el béisbol se han lesionado — los Dodgers sin duda tendrían mucho que decir al respecto — los abridores de los Rays han seguido cumpliendo durante la primera mitad de la campaña.

Detrás de ellos está , uno de los cerradores más confiables del béisbol. Entró después de Baz el jueves contra los Reales para conseguir su salvamento número 15. Entonces, desde el momento en que los Rays estaban con cinco juegos por debajo de .500, han mejorado tanto y tan rápido que llegaron a este fin de semana apenas cuatro juegos por detrás de los Dodgers y los Tigres, que tienen los mejores dos récords con 51-31.

“Creo que nuestro impulso se ha construido durante el último mes”, dijo Cash tras barrer a los Reales. "Hemos hecho muchas cosas muy buenas, y sé que nuestros muchachos están ansiosos por seguir así”.

Los Rays siguen de gira este fin de semana contra los Orioles en Baltimore, con la oportunidad de seguir luchando hasta alcanzar el primer lugar antes de que el calendario del béisbol llegue a su punto de referencia tradicional del 4 de julio. Sería muy fácil llamarlos guerreros de la ruta. Pero son simplemente eso: Guerreros.