Miguel Cabrera rumbo a los 500: faltan tres

30 de julio de 2021

DETROIT -- Miguel Cabrera volvió a hacer de las suyas al sonar par de cuadrangulares este jueves.

Una noche en que la ofensiva de los Tigres de Detroit se encargó de respaldar la sólida salida del abridor Casey Mize, pero Miguel Cabrera se llevó el cinturón del jugador ofensivo del partido al recorrer dos veces las bases con sus batazos.

El juego estaba 3-0 a favor de los Tigres sobre los Orioles de Baltimore en el primer juego de una serie de tres en la casa de los bengalíes. El cielo estaba muy gris al terminar el cuarto inning, pues una enorme nube “pasajera” recorría el sureste de Michigan rumbo a Canadá. Esta nube cambió el intenso calor del día en un agradable pero peligroso clima que pudo haber puesto en peligro la culminación del juego.

Afortunadamente esa nube no “agarró la seña”.

El tema “hoy cobré” del reguetonero Bad Bunny anunció el turno de Cabrera y con el cielo con ganas de tempestad, el primera base de los Tigres no tardó mucho en cobrar.

Para el juego una dama había llegado con su acompañante a su asiento en la segunda fila detrás del plato durante el tercer episodio. Ella portaba la bandera de Venezuela y la mostraba cuando el nativo de Maracay se acercaba a la caja de bateadores.

El zurdo Alexander Wells le había abierto el turno a “Miggy” con recta bajita y adentro. Acto seguido le repitió la dosis a la misma velocidad, 88.1 millas por hora, pero bajita y por el medio, a lo que y el venezolano no desperdició la oportunidad y la depositó en el túnel donde se guarda el equipo de mantenimiento del terreno, en el bosque derecho, a 363 pies del plato.

La dama con la bandera de Venezuela detrás del plato no paró de saltar y ondear el tricolor del país suramericano y, por supuesto, los 15.833 fanáticos presentes en el estadio le rindieron una merecida ovación a Miguel mientras recorría las bases.

Comerica Park había estrenado este jueves un nuevo contador de hits y cuadrangulares de Miggy, el cual está ubicado en la pared de los inmortales del bosque izquierdo, el 496 duró poco a la vista… apenas una entrada y media.

En el siguiente turno Cabrera sonó el 497, este tablazo también por la banda contraria, a 380 pies de distancia que aterrizó en la grada para que varios fanáticos se apresuraran a recoger el histórico souvenir, para que de nuevo el Comerica Park estallara en aplausos y vítores y para que la bandera de Venezuela volviera a ondear en la segunda fila detrás del home.

Miguel notó el amarillo, azul y rojo vibrando entre el público.

El juego de este jueves se convirtió en el número 43 en que Cabrera pega más de un vuelacercas en su carrera y el segundo en que lo logra en esta temporada. Además, extendió su liderato en juegos con dos o más jonrones en la historia de los Tigres con 34.

Faltan tres.