KANSAS CITY -- Es casi imposible hacer ver a Bobby Witt Jr. sin respuestas en el plato.

El infielder de los Reales, quien es líder de la Liga Americana en imparables (177) y promedio (.352), ha sido una amenaza para los lanzadores rivales durante toda la temporada, lo que lo proyecta como uno de los principales candidatos a Jugador Más Valioso del Joven Circuito.

Sin embargo, el cerrador de los Angelinos, Ben Joyce, tenía otros planes.

El lanzallamas novato, quien ya registró el ponche con el pitcheo más rápido desde que comenzaron a medirse los pitcheos en el 2008 con una recta de 104.7 millas por hora contra J.D. Martínez de los Mets el 3 de agosto, logró impresionar a todos mucho más el martes.

Joyce desde el principio estaba listo para atacar a uno de los mejores bateadores en todo el béisbol. Lanzó una recta de 104.8 mph para iniciar el turno -- el segundo pitcheo más rápido en la temporada del 2024 (por debajo de la recta de 105.1 mph del cubano Aroldis Chapman).

Witt ni alcanzó a darle.

Luego, más fuego -- 104.5 mph sobre el plato. Y otra vez, lo único que Witt pudo hacer contra el quinto lanzamiento más rápido de la campaña fue dar swing en blanco. Joyce luego decidió soltar su versión de un cambio para retirar a su oponente -- otro cohetazo de 103.2 mph en medio de la zona de strike -- y Witt otra vez abanicó.

Fue el primer ponche de tres pitcheos -- cada uno swings en blanco -- en la era en que se miden los lanzamientos con tres rectas por encima de las 103 mph.