NUEVA YORK -- Trea Turner, de los Dodgers de Los Ángeles, y el cubano Yuli Gurriel, de los Astros de Houston, ganaron sus primeros títulos de bateo el domingo, en una temporada de contrastes en que cuatro equipos perdieron más de 100 partidos por tercera vez en la historia y otros cuatro rebasaron las 90 victorias, tan solo en la División Este de la Liga Americana.

El japonés Shohei Ohtani, de los Angelinos de Los Ángeles, fue una sensación con una temporada increíble siendo una doble amenaza, lanzando y bateando, por encima incluso del nivel de Babe Ruth.

Turner bateó para .328 al superar al campeón de bateo de la Liga Nacional, el dominicano Juan Soto, de Washington, quien terminó con promedio de .313.

"Es cuestión de constancia, de lo cual me enorgullezco y lo demuestro diariamente", dijo Turner, un pelotero de 28 años que llegó a los Dodgers proveniente de los Nacionales a finales de julio.

Por su parte, Gurriel lidera la Liga Americana bateando para .319 con los Astros. Su compañero Michael Brantley fue segundo con .311, solo por delante del dominicano Vladimir Guerrero Jr., quien también bateó para .311 con Toronto. Gurriel entró como reemplazo defensivo en la novena entrada el domingo y pegó un sencillo con el que los Astros vencieron 7-6 a los Atléticos de Oakland.

A sus 37 años, el cubano es el segundo campeón de bateo de mayor edad, detrás de Barry Bonds, quien lo consiguió a los 38 años en 2002.

Ohtani, de 27 años, fue segundo en la Liga Americana con .592 en porcentaje de slugging. El japonés lideró la Liga Americana con ocho triples y fue tercero en las ligas mayores con 46 cuadrangulares. Bateó para .257 con 100 carreras producidas y 26 bases robadas.

En el montículo, lideró a los lanzadores de la Liga Americana al limitar a sus rivales a un promedio de bateo .122 con corredores en posición de anotar. Contuvo en un promedio de .087 (de 127-11 ) contra su splitter, la cifra más baja de cualquier lanzamiento en Grandes Ligas con un mínimo de 110 apariciones en el plato.

El receptor venezolano Salvador Pérez, de Kansas City, y Guerrero empataron en la cima en la lista de cuadrangulares de Grandes Ligas con 48, cada uno, dos más que Ohtani. El dominicano Fernando Tatis Jr., de San Diego, fue el líder de la Nacional con 42. Pérez también encabezó la Liga Americana con 121 carreras producidas y Adam Duvall la Nacional con 113 para Miami y Atlanta.

San Francisco (107), los Dodgers de Los Ángeles (106) y Tampa Bay (100) dieron a Grandes Ligas tres equipos con al menos 100 victorias por cuarta temporada completa consecutiva. Previo a esta seguidilla, solamente había ocurrido en 1942, 1977, 1998, 2002 y 2003.

Los Dodgers establecieron marca de más victorias para un equipo que terminó en segundo lugar de su división, superando las 104 de los Cachorros de Chicago en 1909 y de los Dodgers de Brooklyn en 1942.

Todos los equipos del Este de la Americana, menos los Orioles, ganaron al menos 90 juegos, la primera vez que sucede desde que las ligas se distribuyeron en tres divisiones cada una en 1994 y solo la segunda vez después de 1978 con Nueva York, Boston, Milwaukee y Baltimore.

Arizona y Baltimore (ambos con 110), Texas (102) y Pittsburgh (100) hicieron que por segunda temporada completa seguida cuatro equipos perdieran al menos 100 juegos en una temporada completa, algo que solo había sucedido una vez, en 2002.

Julio Urías, el mexicano de los Dodgers, fue el único pitcher con 20 victorias, la cantidad más baja desde que no hubo ninguno en 2017. Las 16 victorias de Gerrit Cole, de los Yanquis, representaron la menor cifra para el pitcher más ganador en la Liga Americana en una temporada completa.