Alexis Díaz trae su dominio ahora al Juego de Estrellas

10 de julio de 2023

CINCINNATI -- ¿Presión? El cerrador de los Rojos, Alexis Díaz, la recibe con los brazos abiertos. ¿Situaciones de apremio y la victoria pendiendo de un hilo? De eso vive el puertorriqueño.

Aunque este es apenas su segundo año como relevista en Grandes Ligas, Díaz ya es un All-Star en 2023 porque se ha convertido en el cerrador más intocable ahora mismo para los sorpresivamente contendientes Rojos de Cincinnati. “La Machina”, así como el veterano primera base, Joey Votto, ha bautizado al taponero de 26 años. Algo así como “La Máquina”.

“Ha sido bien importante para nuestro club. De verdad, no sé dónde estaríamos sin él”, manifestó Votto. “Nunca se queja. Siempre juega para el equipo. Pero es firme, dominante cuando sube a la loma. Ha sabido salir de apuros cuando la ocasión lo amerita. El muchacho ha sido espectacular todos los santos días”.

Una de las primeras pruebas para Díaz esta campaña llegó en San Diego el 2 de mayo. Con el corredor automático a bordo en la 10ma entrada, el derecho cedió la base por bolas al primer bateador y puso corredores en primera y segunda base. Eso lo dejó enfrentando a uno de los tríos de cañoneros más temibles de todo el béisbol– los dominicanos Fernando Tatis Jr., Manny Machado y Juan Soto.

Díaz le tiró a Tatis dos sliders y una recta para poncharlo en tres lanzamientos. Machado fue dominado con un elevado y Soto, tras ponerse arriba en la cuenta 2-1, recibió un slider de puerta de atrás a la esquina de afuera para el tercer strike y de esa forma Díaz aseguró la victoria por 2-1.

No hay temor, ni intimidación.

“Es una estrella. Eso es lo que las estrellas hacen”, elogió Votto.

En 40 presentaciones previo a la jornada del viernes, Díaz tiene marca de 3-1 junto a una efectividad de 2.08 y 1.03 de WHIP. El oriundo de Humacao, Puerto Rico, ha salvado 25 juegos en 26 oportunidades. Su racha de 27 rescates seguidos – que comenzó en 2022 – terminó el 30 de junio durante un triunfo de 7-5 en 11 innings sobre los Padres, cuando desperdició la oportunidad de salvamento en la parte alta del noveno capítulo. Fue la seguidilla activa más larga en las Mayores.

“Para mí, tiene que ver con ser agresivo y con mantener esa misma agresividad en cada presentación”, declaró. “Esas cosas van a suceder. Te van a anotar carreras, pero tienes que mantener una mentalidad positiva y mantener esa agresividad en la zona, y esas cosas sucederán y seremos capaces de salir avante”.

En el 2022, Díaz estaba en un campamento de Grandes Ligas por primera vez. No era visto como un prospecto, sino más bien como el hermano menor del taponero estelar de los Mets, Edwin Díaz.

Aunque sólo había llegado al nivel Doble-A en el 2021, Díaz impresionó con su recta, generando una alta tasa de swings fallidos, además de un sólido slider. Hizo el equipo tras la pretemporada, saltándose Triple-A.

En 59 presentaciones del año pasado, el boricua lideró a Cincinnati con siete triunfos y 10 salvamentos en 14 intentos, dejando una efectividad de 1.84 y WHIP de 0.96. Pasó de lanzar en situaciones de poco apremio a recibir cada vez más responsabilidades en los episodios finales.

De cara a esta campaña, los Rojos no anticiparon competir, sino seguir su reconstrucción. Sin embargo, el club ha ascendido hasta convertirse en un legítimo candidato en la lucha de la División Central de la Liga Nacional, luego de despegar el mes pasado. Díaz tuvo que evolucionar rápidamente en su puesto de cerrador, especialmente por lo mucho que fue necesitado durante una racha de 12 victorias consecutivas de los Rojos.

“Es increíble. Se comporta como un veterano”, expresó el relevista Buck Farmer. “Es genial sentarse a verlo. Incluso cuando pasa problemas, logra escapar y bajarle las revoluciones al juego para salir de aprietos. No muchos chicos pueden hacer eso a esa edad”.

Díaz fue utilizado mucho en días consecutivos, subiéndose a la loma en siete de los últimos 10 partidos del equipo en junio y en un período de 12 de 18 compromisos, en plena seguidilla de los Rojos. Así de indispensable se ha convertido el puertorriqueño, para una novena plagada de talento joven y novatos.

“Es una gran experiencia, y Alexis entra en esa categoría”, dijo el manager David Bell. “No veo a Alexis cambiando. Siempre sabe que tiene que seguir mejorando; encontrar las formas para ello. Sólo creo que chicos así sacan lo mejor de los lanzadores y jugadores. Está en el tope de la lista de esos chicos”.

Tener una habilidad innata de brillar bajo presión ciertamente lo ha ayudado a lucir en el puesto de cerrador.

“No importa lo que pase, si tu espalda está contra la pared, sólo tienes que confiar en ti, confiar en su repertorio”, expresó Bell. “Al final, una vez dejas ir [la bola], no sabes con seguridad lo que va a pasar. Con eso en mente, sólo debes creer realmente en lo que estás haciendo, y eso es lo que ha podido hacer Alexis”.