Aumenta la presencia colombiana en Grandes Ligas

25 de septiembre de 2019

NUEVA YORK -- Durante las votaciones para el Juego de Estrellas del 2019, al abridor colombiano de los Bravos, Julio Teherán, le pasó por la mente pedirles a sus seguidores en las redes sociales que apoyaran a su amigo de la infancia, Gio Urshela, quien ha sido una revelación en la tercera base por los Yankees esta temporada. Al final, Teherán se cohibió de hacerlo porque no sabía si era apropiado hacerle campaña a un jugador de otro equipo.

Para Teherán, fue un dilema agradable. Como uno de los pocos jugadores colombianos afianzados en Grandes Ligas, han sido escasas sus oportunidades para apoyar a un compatriota.

Y es que mientras la República Dominicana, Venezuela, Puerto Rico, Cuba y México han nutrido de talento a las Mayores, solamente 24 de los más de 19,000 jugadores que han militado en la Gran Carpa hasta la fecha han nacido en Colombia. No es del todo sorprendente; como en casi todo Sudamérica, en Colombia el deporte más popular es el fútbol.

El primer ligamayorista nacido en Colombia fue el segunda base y jardinero Luis Miguel Castro, quien jugó por los Atléticos de Filadelfia en 1902 y fue también el primer jugador latinoamericano en Grandes Ligas. Ningún colombiano volvió a pisar la Gran Carpa hasta 1974, cuando Orlando Ramírez se uniformó por los Angelinos de California.

Pero fueron los infielders Orlando Cabrera y Edgar Rentería que verdaderamente pusieron a Colombia en el mapa beisbolero a finales de los años 90 y principios del nuevo milenio.

Recientemente, es cada vez más grande la presencia colombiana en Grandes Ligas. Urshela y Teherán son dos de 10 jugadores nacidos en Colombia que han disputado juegos en la Gran Carpa esta temporada. (Un undécimo jugador, el guardabosque de los Nacionales Adrián Sánchez, es hijo de padres colombianos pero nacido en Venezuela.) Y todos están pendientes uno del otro.

“Siempre conocemos quién ha sido votado, quién está sobresaliendo más”, dijo Teherán.

Urshela se ha convertido en uno de los rostros de esa camada, junto con Teherán y el zurdo José Quintana de los Cachorros. Aunque no fue seleccionado para el Juego de Estrellas, su actuación al bate por Nueva York luego de ser dado de baja por los Indios y los Azulejos sigue siendo una de las mejores historias de la presente temporada.

“De verdad me siento orgulloso de ese grupo pequeño [de colombianos] que está jugando aquí en las Grandes Ligas”, expresó Urshela, quien con su 18vo cuadrangular de la campaña el 12 de agosto impuso una marca de jonrones para un jugador colombiano, superando a Cabrera, quien conectó 17 bambinazos por los Expos de Montreal en el 2003.

Otra muestra de la creciente representación colombiana en las Mayores son los Marlins del 2019, el primer equipo en la historia de Grandes Ligas con tres colombianos en su roster: El jardinero Harold Ramírez, el relevista Tayron Guerrero y el receptor Jorge Alfaro.

“Estar tres colombianos en el mismo equipo, creo que eso nos ayuda muchísimo”, dijo Guerrero. “Nos mantenemos más unidos, hablamos mucho más, casi siempre nos la pasamos conversando, lo cual nos ayuda muchísimo. Nos ayudamos en los días malos entre nosotros. Es algo que siempre hemos querido”.

Y hay más talento colombiano en camino.

Aproximadamente 90 jugadores nacidos en Colombia vieron acción en ligas menores durante la campaña del 2019. (Dicha cifra incluye a varios jugadores que fue ascendidos a Grandes Ligas durante la temporada.)

Y hay un colombiano en la lista de los 100 Mejores Prospectos de MLB Pipeline: El diestro de los Padres Luis Patiño, considerado el prospecto número 3 de San Diego y el número 31 de Grandes Ligas. Patiño fue uno de dos colombianos invitados al Juego de las Futuras Estrellas en Cleveland. El otro fue el receptor de los Rays, Ronaldo Hernández, a quien se le considera el prospecto número 7 de Tampa Bay.

“Siempre nos seguimos a cada uno. Tenemos el chance de vernos triunfar”, dijo el jardinero de los Indios, Oscar Mercado, quien debutó por la Tribu esta temporada a sus 24 años. "Sabemos que no somos muchos, pero estamos aquí para poner el nombre de la pelota colombiana en alto”.

BÉISBOL EN DESARROLLO

Los colombianos que se encuentran en Grandes Ligas ahora mismo tuvieron como inspiración a las figuras de Rentería y Cabrera. El hermano mayor de Edgar, Edinson, un ex campocorto de liga menor que desde 1999 ha sido presidente de la Liga Colombiana de Béisbol Profesional (LCBP), considera que el éxito de dichos jugadores alimentó el interés por el béisbol en la generación actual.

Edgar, quien fue convocado a cinco Juegos de Estrellas, ganó dos anillos de Serie Mundial -- la primera con los Marlins en 1997, cuando dio el batazo ganador en el Juego 7 ante los Indios -- y otra con los Gigantes en el 2010, cuando fue reconocido como el Jugador Más Valioso del Clásico de Otoño al conectar el cuadrangular de la victoria en el decisivo Juego 5. Cabrera fue parte de los Medias Rojas del 2004 que le pusieron fin a la sequía de 86 años de Boston sin un título de Serie Mundial.

“Cuando mi hermano jugó en los Marlins, que quedó campeón y después Orlando Cabrera con Boston, ahí comenzó también el interés de los muchachos”, dijo Edinson.

La camada actual de ligamayoristas colombianos también creció en una época en la cual la LCBP ha gozado de bastante estabilidad, lo cual no siempre ha sido el caso. Fundada en 1948, la liga estuvo inactiva de 1959 to 1978 y de 1989 a 1992.

“Creo que estas interrupciones le quitaron motivación al pelotero colombiano de jugar profesional”, dijo Edinson. “Si eso hubiese sido continuo, del 48 hasta ahora, hubiésemos estado a la par de Dominicana, Venezuela, Puerto Rico y México”.

Desde el 2004, la LCBP ha pertenecido a la Confederación de Béisbol Profesional del Caribe, aunque todavía no disputa una Serie del Caribe. Eso podría cambiar en el 2020 gracias a un nuevo acuerdo bajo el cual el campeón de la Serie Latinoamericana, en la que participa Colombia, participaría en la Serie del Caribe.

El Clásico Mundial de Béisbol de 2017 también representó un paso positivo para la pelota colombiana en los planos internacionales. La selección de Colombia clasificó para el torneo por primera vez y tuvo una buena actuación en la primera ronda, terminando con marca de 1-2 en un Grupo C que incluyó a Canadá, República Dominicana y los Estados Unidos. Ambas derrotas de Colombia fueron en extrainnings.

La esperanza de todas las partes es que la creciente presencia colombiana en Grandes Ligas sirva para estimular más el interés de posibles patrocinadores en el béisbol profesional en el país sudamericano.

“Mañana ojalá sean 20 o 30 [colombianos en Grandes Ligas]”, dijo Quintana. “Sería muy bueno para que las empresas y la gente vean que en el béisbol también hay un gran potencial en Colombia”.

“COMO FAMILIA”

Ser un ligamayorista colombiano en el 2019 es ser parte de un grupo muy unido, dentro de fuera de terreno de juego. “Hermandad, así como familia,” es como lo describe Harold Ramírez.

La mayoría de los jugadores colombianos en Grandes Ligas pertenecen a un grupo de WhatsApp que les permite mantenerse en contacto durante la temporada. Los lazos fuera del terreno son iguales de fuertes. Celebran cumpleaños juntos si caen durante el invierno y se reúnen los fines de semana para almorzar juntos y jugar dominó.

“Siempre estamos en contacto, apoyándonos, dándonos consejos, molestándonos entre nosotros. Y cuando estamos en Colombia ni se diga”, dijo Ramírez.

Hay dos grupos que entrenan en Colombia durante el receso de temporada. Uno, encabezado por Teherán, tiene base en Cartagena. El otro, del cual Quintana es el líder, entrena en Barranquilla. A veces las dos escuadras se reúnen para disputar juegos de softbol amistosos.

“Siempre nos estamos reuniendo para entrenar juntos, para hacer crecer este maravilloso deporte en nuestro país”, dijo Patiño, quien entrena con Quintana, en quien ha hallado un gran apoyo.

“Hoy en día es un gran amigo”, dijo Patiño. “Para mí, es como un papá en este deporte. Tengo la comunicación con él abierta para preguntarle lo que sea, lo que necesite. Siempre está ahí para mí. Gracias a Dios, tengo ese apoyo de ese gran jugador colombiano”.