Con los lanzadores y receptores programados para reportarse a Fort Myers, Florida, en un par de semanas, es hora de analizar a los Medias Rojas del 2019 posición por posición. En esta ocasión examinaremos de cerca a sus receptores.
BOSTON -- Los Medias Rojas asumieron un enfoque único detrás del plato la pasada campaña al contar con tres receptores en el roster activo durante casi todo el año. La única excepción fue un trecho de seis semanas que comenzó a mediados de julio cuando el puertorriqueño Christian Vázquez quedó fuera tras sufrir una fractura en el dedo meñique derecho. 
No esperen que los Patirrojos vuelvan a acarrear a tres catchers para este 2019. Simplemente no es sustentable desde el punto de vista del roster, razón por la cual la mayoría de los equipos en Grandes Ligas sólo cuentan con dos caretas a la vez.
Salvo un canje previo a los entrenamientos primaverales, los receptores Vázquez, Blake Swihart y el venezolano Sandy León se reportarán todos a los entrenamientos, lo que generará una situación bastante interesante. Al final de la primavera uno de ellos no estará en el roster del Día Inaugural. 
Para un equipo de Boston que ya tiene bien establecido a sus otros ocho titulares en su lineup, la dura competencia por ganarse el rol de cátcher regular será una de las historias a seguir durante la pretemporada.
El candidato a repuntar
Existe una razón para creer que este finalmente podría ser el año de Swihart. Mientras que el equipo se mostró cauteloso al hablar del bateador ambidextro a estas alturas el año pasado, y más a menudo habló acera de su habilidad para jugar varias posiciones, el tono ha cambiado de manera significativa en estos días.
"Primero que nada, el muchacho llegará a los entrenamientos con la intención de competir por el puesto de receptor titular", declaró el presidente de operaciones de béisbol Dave Dombrowski. "Ahora, se encuentra en una posición en la que tiene la habilidad de hacer muchas otras cosas, por lo tanto, puede mantener su bate en el lineup cuando otro esté cubriendo la receptoría, pero seguramente será una parte importante de nuestro club y luchará para tratar de ganarse un puesto como titular".

De 26 años de edad, Swihart es quien posee más potencial con el madero de este trio. De hecho, Swihart era bien conocido por su bate en las menores. Sin embargo, la capacidad ofensiva de Swihart no se tradujo en su papel de jugador de medio tiempo el año pasado, cuando registró OPS de .613 en 207 visitas al plato. Los Medias Rojas no sabrán con qué clase de bateador realmente cuentan hasta que Swihart reciba una mayor oportunidad de mostrarse.
La defensa es la razón para sentirse optimistas acerca de Swihart hoy en día. El joven exhibió bastante progreso detrás de bambalinas el año pasado mientras trabajó con los instructores de la receptoría Jason Varitek y Chad Epperson, y los Medias Rojas están ansiosos por ver cómo se traducirán dichas mejorías en el terreno de juego.

"Defensivamente, puedes ver a Blake, los pasos que logró dar: bloqueando pitcheos, tomando bien en serio los reportes de los escuchas y dirigiendo los partidos", destacó el piloto boricua Alex Cora.
La apuesta segura
Esencialmente, los Medias Rojas se comprometieron con Vázquez como su receptor del futuro inmediato cuando lo firmaron el pasado invierno a un contrato de tres temporadas y US$13.55 millones que incluye una opción para el 2022. Esta es la razón por la cual mantenerlo como la primera opción detrás del plato es la elección segura y más convencional. 
Sin embargo, los Patirrojos al final se inclinarán por el cátcher que ellos piensen les dará la mejor oportunidad.

Vázquez llevaba ritmo de ser el receptor que más oportunidades recibiría el año pasado hasta que sufrió la lesión. El puertorriqueño terminó iniciando 67 juegos detrás del plato, 11 menos que el venezolano León. Su línea de bateo de .207/.253/.283 fue la mayor decepción. Quizás estaba tratando de hacer más de la cuenta después de recibir la extensión de contrato. Basta con ver sus números en 2017 (.290/.330/.404) para darse cuenta de que Vázquez tiene la capacidad para ser un bateador sólido.
Mientras que el boricua es bien conocido por su potente brazo y tremendas habilidades con el guante, Vázquez ha ido inconsistente al momento de dirigir los partidos a lo largo de su carrera. En ese sentido, los Medias Rojas sintieron que Vázquez exhibió mejoría durante la postemporada el año pasado, y era el quien estaba detrás del plato cuando el zurdo Chris Sale lanzó ese devastador slider que le puso fin a la Serie Mundial.
"El Christian que ustedes vieron en septiembre y octubre es el Christian que queríamos ver desde el principio", manifestó Cora. "El muchacho estuvo tremendo".
El menos favorito
León ya ha sido descartado en el pasado y ha logrado resurgir, entonces, ¿quién dice que no puede volverlo a hacer?

Ha quedado claro que su revelación con el madero en 2016 (.310/.369/.476) fue un caso aparte. Pero para poder seguir con los Medias Rojas, León necesita ser más productivo que el año pasado, cuando se convirtió en casi un out automático en los últimos dos meses de la campaña regular y en los playoffs. El OPS de León en la temporada fue un anémico .511. Por lo menos, León necesita duplicar lo que hizo en 2017, cuando tuvo OPS de .644.
Entonces, ¿por qué León sigue con los Medias Rojas a pesar de sus deficiencias ofensivas? Si hablamos de manera general, el venezolano es su mejor defensor detrás del plato. León cuenta con manos suaves, una tremenda capacidad para bloquear pitcheos y un potente brazo. Además, a los pitchers les encanta tenerlo detrás del plato, particularmente a Sale.