Clasificando las cinco mejores rivalidades en la historia de Grandes Ligas

6 de septiembre de 2018

Más allá de la mala sangre que pueda haber en un momento determinado entre dos equipos, como ocurrió hace un par de años entre Azulejos y Rangers, las verdaderas rivalidades del béisbol tienen que tener algo mucho más básico, y en muchas ocasiones realmente no tiene demasiado que ver con los peloteros. Nos referimos a los fanáticos.
Los niños en Boston a aprenden a detestar a los Yankees casi antes de que aprender a caminar. Los niños en Nueva York saben que cuando los Medias Rojas vienen al Bronx no es una serie más. Algo similar pasa entre los seguidores de los Cachorros y los Cardenales.
Aunque hay décadas de historia entre cada bando, la clave son los fanáticos. Son ellos los que ponen el sabor.
Cole Hamels dijo el fin de semana que Cerveceros-Cachorros no era una rivalidad porque Miller Park estaba lleno de seguidores de Chicago. Permítannos disentir del abridor de los Cachorros.
En realidad, es fácil argumentar que todos esos fanáticos de los Cachorros en el estadio de los Cerveceros sirvieron para alborotar el avispero.
Todos sabemos que los Cachorros tienen rivales más grandes que los Cerveceros. Pero al estar tan cerca uno de otro en la tabla, y dado que los fanáticos de Milwaukee están desesperados por salir airosos cada vez que se topan unos y otros, todos los ingredientes están servidos para una gran rivalidad.
Así que con eso en mente, aquí les dejamos nuestra lista de las cinco mejores rivalidades del béisbol:
1. Medias Rojas-Yankees
Yo sé lo que están pensando. ¿No te cansas de seguir inflando esto? En realidad, no. No hay mejor enfrentamiento en todo el deporte, porque a los fanáticos les importa de corazón lo que pasa, los dos equipos son competitivos la mayoría de los años y los juegos suelen tener un nivel extra de intensidad. Hay años de historia, de Aaron Boone a Bucky Dent al dominicano Pedro Martínez a Don Zimmer a Dave Robets y Curt Schilling. No hay nada mejor en el deporte.
2. Dodgers-Gigantes
Una dinámica parecida. Estos dos clubes tienen más de un siglo jugando, ambos tuvieron su primer hogar en Nueva York, separados por pocas millas, y desde entonces pareciese que siempre hay algo en juego cuando se ven las caras.

3. Cachorros-Cardenales
Hubo una vez, hace pocos años, cuando los dos managers -- Tony La Russa de los Cardenales y Dusty Baker de los Cachorros-se tenían tan poco cariño que la serie se puso peligrosa.
Hubo tantos pitcheos pegados, tantas peleas y conatos de peleas, que hubiese sido apropiado que ambos dirigentes se hubiesen reunido en un estacionamiento para arreglar sus problemas mientras los peloteros jugaban pelota. Pero más allá de eso, sí, Cachorros-Cardenales significa mucho en ambas ciudades.
4. Bravos-Mets
¿Sabían que el primer contrato profesional de Tom Seaver fue con los Bravos? Eso fue en 1966, y cuando fue decretado inválido, los Mets terminaron con el futuro miembro del Salón de la Fama. Y como no podía ser de otra manera, Seaver ganó el Juego 1 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional de 1969 entre los Bravos y los Mets.
Esto no se convirtió realmente en una rivalidad hasta que los Bravos fueron mudados a la División Este de la L.N. en 1994. Aunque la SCLN de 1999 -donde los Bravos vencieron a los Mets en seis juegos-fue el punto más alto, los juegos Bravos-Mets siempre han tenido un sabor especial.
5. Cachorros-Cerveceros
¿Por qué no? Hay dos ingredientes importantísimos para una gran rivalidad: Proximidad e interés de la afición. Hay tantos fanáticos de los Cachorros viviendo en el sur de Wisconsin que la demarcación del territorio de los Cachorros y el territorio de los Cerveceros no siempre está clara. Pero los seguidores de Milwaukee no disfrutan nada tanto como vencer a los Cachorros, y así es como siempre empiezan estos grandes antagonismos.